El tercer encierro de San Fermín, rápido y limpio con toros de Victoriano del Río

Un encierro rápido y limpio, con carreras vistosas y alguna caída, así ha sido el tercer encierro de las fiestas de San Fermín 2023, protagonizado por los toros de la ganadería Victoriano del Río.

Un comienzo fulgurante y un ritmo trepidante

El encierro, que ha durado tan solo 2 minutos y 28 segundos, ha comenzado puntual a las 8:00 horas, tras los tres tradicionales cánticos a San Fermín. La mañana se presentaba con buen tiempo en la capital navarra, creando el ambiente perfecto para una carrera emocionante.

La manada ha salido de los corrales de Santo Domingo de forma compacta, encabezada por los cabestros, y manteniendo la formación durante los primeros metros. A lo largo de la cuesta de Santo Domingo, el grupo se ha mantenido unido, lo que ha permitido a los mozos protagonizar bonitas carreras al lado de los toros. Sin embargo, la velocidad de los animales ha provocado numerosas caídas a lo largo del recorrido.

El ritmo trepidante se ha mantenido en todo momento. Ni siquiera la Plaza del Ayuntamiento o el tramo de Mercaderes han logrado frenar la carrera. La manada ha seguido agrupada, aunque ligeramente más estirada, lo que ha añadido un punto de dificultad para los corredores.

Tensión en la Estafeta y momentos de peligro

Los toros de la ganadería madrileña han entrado en la calle Estafeta sin caer en la curva, con un cabestro a la cabeza. En este punto, el grupo ha comenzado a estirarse hasta dividirse en dos, con tres toros ligeramente rezagados. Esta situación ha permitido a los corredores más experimentados hacer largas y vistosas carreras junto a los astados.

Sin embargo, la cantidad de mozos presentes en el encierro de este martes ha provocado muchas caídas y algunos momentos de tensión. Especialmente al entrar en la zona de Telefónica y en el callejón de la Plaza de Toros, donde la aglomeración ha sido mayor.

Un toro, escorado a la derecha, ha pasado rozando a los corredores que se encontraban cerca del vallado. Un poco más adelante, en la bajada del callejón, varios mozos han caído en la parte derecha formando un pequeño montón al paso del primer grupo de la manada. Uno de los ‘victorianos’ ha rozado con los cuernos a los jóvenes caídos, aunque afortunadamente sin mayores consecuencias.

Un final rápido y emocionante para una carrera memorable

Ya dentro de la Plaza de Toros, con la ayuda de los dobladores, los cabestros y los toros han entrado en los corrales completando así una carrera muy rápida, emocionante y que será recordada por su intensidad.

Los seis astados de Victoriano del Río fueron lidiados por la tarde en la plaza de toros por los diestros Sebastián Castella, Emilio de Justo y Ginés Marín, en una corrida que prometía estar a la altura del emocionante encierro matutino.