Ceoma critica que se pidan jubilaciones más tardías con un paro tan «elevado» entre los mayores de 50 años

La Confederación Española de Organizaciones de Mayores (Ceoma) ha emitido una alerta sobre el «gran impacto psicológico y social» que sufren las personas mayores de 50 años al permanecer desempleadas, con la única opción de recibir un subsidio a partir de los 52 años y esperar hasta alcanzar la edad de jubilación.

El presidente de Ceoma, José Luis Fernández, ha criticado que, mientras se retrasa la edad de jubilación hasta los 66 años y 6 meses, la tasa de desempleo entre los mayores de 50 años sigue siendo muy elevada. Según Fernández, «es algo muy contradictorio» exigir que las personas se jubilen más tarde si no se les ofrece oportunidades laborales a partir de cierta edad.

El Desempleo Persistente entre los Trabajadores Mayores

Según los datos del Servicio Público de Empleo, los parados de 50 a 54 años superan los 340.000, a los que se suman otros 412.000 desempleados de 55 a 59 años y 437.000 mayores de 59 años. En total, los parados de 50 y más años sobrepasan los 1,19 millones, es decir, el 46,5% del total de desempleados contabilizados.

Además, Ceoma resalta que el 60,7% de los parados mayores de 50 años son mujeres, lo que «se convierte en una misión imposible para conseguir un empleo«. Este porcentaje es ligeramente superior al 60,4% que representan las mujeres sobre el total de parados.

Fernández advierte que, con el retraso en la edad de paternidad y maternidad, muchas personas de más de 50 años «tienen hijos pequeños y cargas hipotecarias, por lo que su situación es desoladora» y conlleva «problemas de salud mental que la sociedad no está atendiendo de forma adecuada».

La Necesidad de Acciones Concretas para los Trabajadores Mayores

Ante esta situación, Fernández ha reclamado a empresarios y administraciones que «no sigan mirando hacia otro lado» y «tomen decisiones que ayuden a este colectivo», que a menudo «se queda sin oportunidades laborales», a pesar de que la veteranía «aporta una experiencia y unas cualidades que redundan en beneficio de las compañías y que contribuyen a su desarrollo económico».

Para potenciar la inclusión laboral de los trabajadores mayores, el presidente de Ceoma ha pedido planes de formación específicos, una promoción de la formación a lo largo de la vida, fijar criterios de flexibilidad organizativa y potenciar la transmisión del conocimiento.

Además, Ceoma ha impulsado el proyecto «Empresas amigables» para concienciar sobre la importancia de evitar caer en estereotipos y en edadismos, ofreciendo actuaciones y acciones formativas para que las empresas sean más amigables con las personas mayores. Las empresas que cumplan con los requisitos recibirán una acreditación que les reconocerá como «empresas amigables con las personas mayores», lo que puede mejorar su imagen, reputación y competitividad.