Imagina transportarte al corazón de la antigua Roma y presenciar cómo se disfrutaba del vino más antiguo del mundo, recientemente descubierto en una tumba romana en Carmona, España. Este vino blanco, conservado en una urna funeraria durante más de 2.000 años, ofrece una fascinante ventana a las tradiciones vinícolas de la época romana. Aunque los métodos de consumo nos parecen inusuales hoy en día, los romanos tenían formas únicas de apreciar esta preciada bebida.
2Ingredientes insólitos del vino romano
Los métodos de preparación y consumo de esta bebida en la antigua Roma eran muy diferentes de los actuales. Además de diluirlo en agua caliente y mezclarlo con especias y miel para crear el «mulsum», los romanos añadían ingredientes poco convencionales como agua de mar, resina e incluso yeso. Estos elementos no solo buscaban mejorar el sabor y la conservación de esta bebida, sino que también reflejaban las preocupaciones de salud y preservación de la época. La utilización de agua de mar, por ejemplo, no solo añadía un toque salado sino que también se pensaba que purificaba y preservaba el vino de manera más efectiva.