Carlos Alcaraz afirma que quiere seguir avanzando y ser uno de los mejores de la historia

Carlos Alcaraz, siempre ambicioso, no duda en compartir sus grandes sueños en el tenis. Tras debutar con victoria en Wimbledon 2024, el jugador español discute abiertamente sus objetivos, la presión de defender el título y la posibilidad de enfrentarse a Jannik Sinner en semifinales o a Novak Djokovic en la final.

El tenista murciano llega a esta edición de Wimbledon como campeón defensor, pero asegura que eso no le afecta demasiado. «No cambia demasiado realmente para mí«, explica Carlos en una entrevista. «Lo hace incluso más especial. Estoy intentando no pensar en la presión de defender los puntos o de querer llegar lejos. La diferencia con respecto al año anterior es que soy más maduro. Sé cómo jugar sobre hierba, tengo más experiencia en esta superficie«, dice Alcaraz, quien el año pasado se fue invicto del césped británico tras ganar tanto en Queen’s como en el Grand Slam londinense.

Carlos Alcaraz pone los pies en la tierra

«Todo el mundo quiere ver el partido de Jannik contra mí en semifinales y luego a Jannik o a mí en la final contra Novak. Todos esperan ese momento, pero es un proceso muy largo, un camino muy largo, así que veremos si llego a estar en esa posición«, comenta de manera prudente el español, quien no quiere asegurar todavía una posible reedición de la pasada final en el All England Club.

«Cuando me preguntaron cuál es mi sueño en este momento, respondí que quiero ser uno de los mejores de la historia. Estoy soñando en grande. Quiero sentarme a la misma mesa que el Big 3, las leyendas de nuestro deporte. Para alcanzar ese sueño, me gustaría estar rodeado de marcas y personas que lo compartan y que piensen tan en grande como yo. Si miro atrás, he logrado grandes cosas hasta ahora, pero no quiero detenerme en eso, quiero seguir avanzando».

La divertida anécdota de Alcaraz durante el entrenamiento

El mal clima presente este martes en Londres ha alterado los planes de entrenamiento de Carlos Alcaraz. El murciano tenía programada una sesión de entrenamiento de una hora (de 12:30 a 13:30), pero tuvo que retrasarla debido a las condiciones meteorológicas. Cuando finalmente pudo acceder a la hierba, se dirigió con su equipo al Aorangi Park. Para su sorpresa, al llegar, la red no estaba instalada. Tuvo que esperar unos minutos hasta que los operarios prepararan la cancha.

Durante la espera, se entretuvo jugando a tenis-golf. Luego, entrenó durante 45 minutos junto a su hermano Álvaro, bajo la atenta mirada de su entrenador Juan Carlos Ferrero. El número tres mundial buscará este miércoles su pase a la tercera ronda contra el australiano Aleksandar Vukic, un partido que se presenta, cuanto menos, interesante.