Terminar con tu pareja es una de las decisiones más difíciles que debes tomar en tu vida. Decirle adiós a alguien que amas, o amaste mucho porque la relación ya no funciona suele ser bastante complicado, y las personas puedes demorarse días, meses e inclusive años para tomar esta decisión tan radical, sin darse cuenta que están afectándose a sí mismas.
Por eso, si tienes pareja y deseas que vuestra relación nunca termine, lo mejor que podéis hacer es hablar con dicha persona y plantearle las cosas que tú crees que se deberían mejorar para seguir adelante con el proyecto de vida en conjunto. Si no lo haces, entraréis en una espiral de desencanto de la cual es muy difícil poderse zafar.
Escuchar con empatía, ir a terapia de pareja, tratar de entender las necesidades de la otra persona sin dejar atrás los tuyos y demás son algunas de las cosas que podrías hacer para no romper. Sin embargo, si todo parece no tener marcha atrás, vais a tener que identificar algunas de las señales que te indican que lo mejor es decir adiós.
1Señales de que debes dejar a tu pareja
Las dos primeras señales son bastante notorias. Por un lado, si todo te molesta de tu pareja y si, por el otro, te sientes solo estando con ella, deberías tomar en consideración la posibilidad de daros un tiempo y pensar mejor las cosas en cuanto a su vuestro afectivo.
Otra clave es que, si ya no sientes celos por esa persona, lo más probable es que te haya dejado de interesar. También, el hecho de sentir que tu pareja te rechaza a nivel físico o emocional puede significar que algunas cosas no están bien.
Además, si en un fin de semana o un viernes en la noche prefieres estar con tu grupo de amigos en lugar de con esa persona, esto puede significar que ya le perdiste el interés. Y es por esto que llega un nuevo motivo para romper: ya no quieres poner de tu parte.
Finalmente, si ya no sientes atracción física por esta persona, o estás todo el tiempo pensando en otras opciones de pareja, lo mejor que podéis hacer es ser sinceros y decirle adiós a esa persona para que no la hieras más.