La ciudad de Oporto, en Portugal, ha dado un importante paso hacia una movilidad más eficiente y sostenible con la inauguración de la ampliación de la línea amarilla de su sistema de metro. Este proyecto, liderado por Ferrovial, ha contado con la participación clave de Alstom, una empresa líder en soluciones de transporte ferroviario.
El proyecto ha implicado la construcción de un nuevo tramo de 3,15 kilómetros de línea de metro ligero con doble vía, que conecta la estación de Santo Ovidio con los barrios de Vila Nova de Gaia Mafamude, Vilar do Paraiso, Oliveira do Duero y Vilar do Andorinho. Esta ampliación no solo mejora la cobertura del servicio, sino que también representa un hito importante en el desarrollo de una infraestructura de transporte público más eficiente y respetuosa con el medio ambiente.
El Papel Crucial de Alstom en la Ampliación de la Línea Amarilla
Alstom, una empresa con una sólida presencia en el mercado portugués durante más de tres décadas, ha desempeñado un papel crucial en el desarrollo de este proyecto de expansión. La compañía ha proporcionado los sistemas y la tecnología de señalización necesarios para garantizar el correcto funcionamiento de la nueva línea.
Específicamente, Alstom ha implementado un enclavamiento de última generación que permite el control de los vehículos en tiempo real, mejorando la eficiencia y la seguridad del servicio. Además, la empresa ha mantenido una estrecha colaboración con el Metro do Porto, con el objetivo de mejorar continuamente la movilidad y el confort de los pasajeros en la ciudad.
Ferrovial: Líder en la Construcción de la Ampliación
Por su parte, Ferrovial, una empresa española líder en el sector de la construcción, ha sido la encargada de ejecutar la ampliación de la línea amarilla. En asociación con la constructora portuguesa Alberto Couto Alves, Ferrovial ha llevado a cabo diversas tareas, incluyendo la construcción de un nuevo viaducto, un túnel de 770 metros y la ejecución de tres nuevas estaciones.
Uno de los aspectos más desafiantes de este proyecto ha sido la construcción del viaducto que conecta las estaciones de Santo Ovídio y Manuel Leão. Para ello, se recurrió a una técnica innovadora de empuje de la estructura de 2.746 toneladas, deslizándola por su base de un extremo a otro. Este proceso requirió 143 jornadas de 24 horas y la participación de 77 personas en diferentes turnos.
La exitosa culminación de este proyecto de ampliación de la línea amarilla del metro de Oporto demuestra la capacidad de Ferrovial y Alstom para trabajar en colaboración y entregar soluciones de transporte público de vanguardia que mejoran la movilidad sostenible de la ciudad.
