El desenlace del Grupo C de la EURO 2024 ha sido sorprendente: el empate absoluto entre Dinamarca y Eslovenia dejó a ambos equipos empatados en puntos y diferencia de goles. Sin embargo, lo que inclina la balanza a favor de los daneses es una tarjeta amarilla mostrada al segundo entrenador esloveno durante el partido inaugural contra Serbia.
Esta sanción, que parecía insignificante en ese momento, resultó crucial al determinar que Dinamarca se clasificara en el segundo puesto del grupo, mientras que Eslovenia quedó en tercer lugar. La tensión y la expectativa alcanzaron su punto máximo cuando los resultados finales confirmaron que un pequeño detalle disciplinario en el primer partido tuvo un impacto significativo en el destino de ambos equipos en esta fase inicial del torneo continental.
2Criterios de desempate
La clave de esta clasificación se encuentra en los puntos disciplinarios, una métrica menos conocida pero crucial en competiciones de alto nivel.
Dinamarca recibió seis tarjetas amarillas, mientras que Eslovenia acumuló siete. La tarjeta extra que inclinó la balanza no fue vista por un jugador, sino por el segundo entrenador esloveno durante el primer partido contra Serbia.