La defensa de Begoña Gómez acusa al juez de llevar una investigación prospectiva

En el ámbito de la justicia y el derecho penal, es fundamental que las investigaciones se lleven a cabo de manera rigurosa y con el pleno respeto a los derechos de los investigados. Lamentablemente, en ocasiones se observa que algunos procedimientos penales comienzan como una especie de «investigación prospectiva» en la que, bajo el pretexto de investigar un hecho delictivo, se termina inspeccionando la vida del investigado de manera indiscriminada.

Este tipo de prácticas van en contra de los principios básicos de un Estado de Derecho y deben ser rechazadas enérgicamente. El Tribunal Supremo ya ha advertido en reiteradas ocasiones que el sistema de «inquisición general» ha sido desterrado del moderno y civilizado derecho penal. Los investigados tienen derecho a ser informados desde el inicio de la causa de los hechos que han determinado su incoación y las razones de su implicación.

La Necesidad de Delimitar Claramente el Objeto de la Investigación

En el caso que nos ocupa, la defensa de Begoña Gómez, esposa del presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha denunciado que el juez instructor, Juan Carlos Peinado, está realizando una investigación «prospectiva» sin tener clara la delimitación de los hechos que se investigan.

Según explica el abogado de Begoña Gómez, Antonio Camacho, el exministro del Interior, a lo largo del procedimiento se han solicitado en reiteradas ocasiones al instructor que aclare cuáles son los hechos concretos por los que se sigue la causa. Lamentablemente, estas peticiones han sido infructuosas, lo que ha llevado a la defensa a presentar un recurso de reforma exigiendo ser informada de los hechos por los que se investiga a su cliente.

La Citación del Rector de la Universidad Complutense como Testigo

Uno de los hechos que ha generado mayor malestar en la defensa de Begoña Gómez es la citación del rector de la Universidad Complutense, Joaquín Goyache, como testigo en la investigación. Según Camacho, esta citación es «incomprensible» ya que Goyache «en absoluto está relacionado con los hechos que constituían el objeto de la investigación».

La defensa considera que, hasta que no se aclare cuáles son los hechos concretos por los que se sigue la causa, es imposible comprender la relevancia de la citación del rector de la universidad. Esto pone de manifiesto la importancia de definir claramente el objeto de la investigación desde un inicio, evitando así actuaciones que puedan ser percibidas como una «inquisición general» sobre la vida del investigado.

En resumen, el caso de Begoña Gómez pone de relieve la necesidad de que las investigaciones penales se lleven a cabo con el máximo rigor y respeto a los derechos de los investigados. La delimitación clara y precisa del objeto de la investigación es fundamental para garantizar la validez y legitimidad de los procedimientos judiciales en un Estado de Derecho.