ONG ambientales piden a Planas que la PAC promueva «una transición justa» hacia la sostenibilidad del sector agrario

La Política Agraria Común (PAC) es una de las políticas clave de la Unión Europea que tiene un impacto directo en el sector agrario y alimentario. Desafortunadamente, en los últimos tiempos, esta política ha sido criticada por diversas organizaciones ambientales por no abordar de manera adecuada los desafíos urgentes que enfrentamos, como la crisis climática y la pérdida de biodiversidad.

Estas organizaciones, entre las que se encuentran Amigos de la Tierra, Ecologistas en Acción, Greenpeace, SEO/BirdLife y WWF España, han solicitado al Ministro de Agricultura, Pesca y Alimentación de España, Luis Planas, que la futura PAC promueva una «transición justa hacia la sostenibilidad social y ambiental del sector agrario». Solo de esta manera, aseguran, se podrá garantizar la capacidad de producir alimentos a largo plazo, hacer frente a las crisis geopolíticas y la emergencia climática mundial, y asegurar un futuro próspero para las personas agricultoras y ganaderas.

Hacia una PAC Más Verde y Justa

Recuperar la Transparencia y la Participación

Las organizaciones lamentan los «cambios urgentes» realizados en la PAC en los últimos meses, como la derogación de «aspectos ambientales clave», tras años de negociaciones. Exigen «transparencia» y «participación real» de las organizaciones en el marco de la próxima reunión de ministros de agricultura en Luxemburgo, donde se discutirá la futura orientación de la política agraria de la UE.

El secretario general de WWF, Juan Carlos del Olmo, ha puntualizado que es «urgente» revisar la actual PAC, calificándola como «injusta e ineficaz». Según él, los cambios recientemente aprobados, «sin debate ni participación pública», no resolverán los problemas del sector, sino que lo harán más vulnerable ante desafíos como la sequía o la volatilidad de los mercados, dejando atrás a las fincas de mayor valor social y ambiental.

Reorientar las Ayudas hacia la Sostenibilidad

Por su parte, la directora ejecutiva de SEO/BirdLife, Asunción Ruiz, ha planteado la necesidad de aplicar una visión de largo plazo a las políticas públicas como la PAC. Según ella, «hay muchísimas evidencias científicas que demuestran que una Política Agraria Común más verde es más rentable para los agricultores y más saludable para los consumidores». En su opinión, mantener unos «campos vivos» es «realmente la opción de rentabilidad en el campo», y es necesario «reorientar las ayudas a la generación de bienes públicos, al acompañamiento del sector y a conservar la naturaleza como fuente de recursos».

La directora ejecutiva de Greenpeace, Eva Saldaña, también considera «esencial que esta nueva PAC escuche, involucre en su desarrollo y apoye a los pequeños y medianos agricultores y ganaderos que producen alimentos de calidad respetando el medio ambiente y la biodiversidad; y que a su vez preservan formas de vida y economías locales».

Según ella, la crisis climática y de biodiversidad ya está aquí, y son los propios productores quienes lo sufren de primera mano, por lo que la PAC debe «apoyar esa transición justa de manera urgente poniendo a las personas, el planeta y la democracia en el centro».

Una Transición Hacia la Agroecología

La coordinadora de Ecologistas en Acción, Erika González Briz, ha asegurado que «es imprescindible transformar de forma drástica la actual Política Agraria Común (PAC) que ha sido responsable de fortalecer las grandes producciones agroindustriales e imposibilitar la viabilidad de las pequeñas producciones y la agroecología». Según ella, «solo una transición a gran escala hacia la agroecología que puede realizarse desde las políticas públicas puede asegurar un futuro ambiental y socialmente sostenible en el sector agrario».

Por último, la coordinadora de Amigos de la Tierra, Blanca Ruibal, ha lamentado que se ha perdido «un tiempo que no se tenía» en una planificación de la PAC que «no ha sabido responder a las necesidades de las pequeñas producciones» ni a los «retos de afrontar la crisis climática y la conservación de la naturaleza». Ella «reclama que el próximo ciclo de la PAC ponga a las personas productoras, consumidoras y a la Tierra en el centro de la política agroalimentaria», y que el único camino es la agroecología, tal y como demuestran las evidencias científicas.

En resumen, las organizaciones ambientales han unido sus voces para exigir una transformación urgente de la Política Agraria Común de la Unión Europea, con el objetivo de promover una transición justa hacia la sostenibilidad social y ambiental del sector agrario.

Esto implicaría recuperar la transparencia y la participación en el proceso, reorientar las ayudas hacia la generación de bienes públicos y la conservación de la naturaleza, y apoyar decididamente la transición hacia modelos agroecológicos que garanticen un futuro próspero y resiliente para las personas productoras, consumidoras y el planeta.