Los Dallas Mavericks han logrado una victoria contundente sobre los Boston Celtics en el cuarto partido de las Finales de la NBA. Este triunfo, por un claro 122-84, se ha visto impulsado por la destacada actuación del joven pívot Dereck Lively II, quien ha complementado a Luka Doncic y Kyrie Irving en momentos clave del encuentro.
La franquicia de Texas ha demostrado su superioridad a lo largo del partido, logrando una ventaja de 26 puntos al descanso (61-35) y manteniendo el dominio en la segunda mitad. Los Celtics, por su parte, han sufrido una actuación decepcionante, con Jayson Tatum y Jaylen Brown lejos de su mejor nivel. Además, los actores secundarios de Boston, como Jrue Holiday y Derrick White, no han podido hacer frente al potente juego de los Mavericks.
Liderazgo de los Dallas Mavericks
Los Dallas Mavericks han demostrado su fortaleza en este cuarto partido de las Finales de la NBA. El joven pívot Dereck Lively II ha sido clave en la victoria, ofreciendo una sólida actuación tanto en defensa como en ataque. Su irrupción en los momentos clave ha impulsado a la franquicia de Texas, que se ha apoyado en la anotación de Luka Doncic y Kyrie Irving.
Pese a la ausencia de Kristaps Porzingis, lesionado en su pierna izquierda, los Mavericks han logrado controlar el juego interior. Esto ha sido fundamental para contrarrestar la presencia de Al Horford en la pintura de los Celtics. Además, la franquicia de Texas ha encontrado un buen apoyo en su banquillo, con el escolta australiano Dante Exum aportando ofensivas vitales.
Decepción de los Boston Celtics
Por su parte, los Boston Celtics han sufrido una actuación decepcionante en este encuentro. Jayson Tatum y Jaylen Brown, las principales estrellas del equipo, no han estado a la altura, lo que ha dificultado su capacidad de reacción.
Además, los actores secundarios de Boston, como Jrue Holiday y Derrick White, tampoco han logrado aportar lo suficiente para contrarrestar el dominio de los Mavericks. El técnico Joe Mazzulla ha intentado ajustes, como el uso del «small ball» con Sam Hauser como hombre más alto, pero sin éxito.
La derrota de los Celtics ha sido amplia, con una diferencia de 38 puntos, la tercera mayor en la historia de las Finales de la NBA. Este resultado pone en entredicho la capacidad del equipo de Boston para remontar la eliminatoria y conquistar su título número 18, un récord de la liga.