Desde hace más de 50 años, ha existido incertidumbre acerca de los posibles riesgos asociados al uso de dispositivos móviles Android e iOS, y en particular, si la radiación que emiten podría causar cáncer. En la actualidad, si le preguntas a alguien sobre los peligros de utilizar un teléfono móvil, es común escuchar respuestas como «podrían ser dañinos, pero no sé exactamente por qué… escuché en la radio que pueden provocar cáncer».
4Radiación no-ionizante y su impacto en las células humanas
Los teléfonos móviles pertenecen a la categoría de radiación no-ionizante. La radiación que emiten es extremadamente baja y no tiene suficiente potencia para romper las cadenas moleculares en el interior de las células humanas.En contraste, las radiaciones UV, gamma y rayos-X son muy potentes y sí pueden romper las cadenas moleculares dentro de las células, incluyendo las moléculas de ADN, lo que puede provocar mutaciones durante la replicación celular.
Los rayos UV, rayos-X y rayos gamma, que son considerados radiación ionizante, poseen una energía superior a los 480 kilo-julios por mol. Sin embargo, los teléfonos móviles emiten menos de 0,001 kilo-julios por mol, lo cual representa aproximadamente 480.000 veces menos energía que los rayos UV.Un ingeniero de RF en Stelladoradus, James Browne, afirmó que «recibirías más radiación del sol en una playa en España durante un día que si tuvieras que abrazar una torre de telefonía móvil durante un año».
Es importante destacar que esta afirmación se refiere a una torre con una transmisión masiva, lo cual implica una cantidad significativamente mayor de energía que la emitida por un teléfono móvil. La cantidad de energía emitida por un teléfono móvil es mínima en comparación.
La distancia desde la fuente de la transmisión (el teléfono) hasta ti es importante. La energía emitida por un teléfono móvil es mínima, pero aún no se sabe si pasar largos periodos de tiempo con el teléfono pegado a la cabeza o a la ingle conlleva algún riesgo. Diferentes estudios han arrojado resultados contradictorios.
La Agencia Internacional de Investigación contra el Cáncer ha afirmado que la radiación no-ionizante podría causar cáncer en los humanos. Sin embargo, en un estudio realizado en Dinamarca se hizo un seguimiento a 420.000 ciudadanos durante 20 años y no se encontró ningún incremento en el riesgo de cáncer relacionado con el uso del teléfono móvil. En resumen, no hay una respuesta definitiva sobre los efectos de la radiación cerca de la cabeza. Mientras tanto, se recomienda tomar medidas para minimizar cualquier riesgo