El dilema de la última croqueta, una situación cotidiana que puede generar incomodidad y hasta roces entre comensales. ¿A quién le corresponde ese último manjar frito, dorado y crujiente? ¿Existe una regla de etiqueta que dicte el destino de esta deliciosa pieza?
Para resolver este enigma gastronómico, acudimos a una experta en la materia, María José Gómez y Verdú, quien, además de ser una reconocida figura en el mundo del protocolo y conocida en redes sociales como @protocoloyetiqueta.es, ofrece una respuesta clara y concisa a este dilema.
5La importancia de detectar las señales de los invitados
La experta en protocolo aclara que estas normas no son rígidas e inflexibles, lo más importante es observar las señales de los demás comensales para detectar quién muestra mayor interés en la última croqueta.
Al ceder la última croqueta, el anfitrión no solo demuestra cortesía, sino también generosidad y empatía, se convierte en un gesto que contribuye a crear un ambiente agradable y armónico en la mesa.