Reuniones con amigos, familia o cualquier evento social en verano tiene hielo de por medio. El calor puede tornarse insoportable por momento, pero este derivado líquido del agua también ‘sufre’ a duras penas. Es que con dejarlo tan solo unos minutos fuera del refrigerador, el mismo se va a derretir, ¡Casi en un abrir y cerrar de ojos! La gente ante esto ha creado bolsos térmicos, especiales y derivados, aunque no son justamente los que utilizaremos hoy.
Lastimosamente y por más que no te agrade leerlo, el hielo se va a derretir en cualquier momento, pero si ponemos bastante de nuestra voluntad lograremos estirar lo máximo posible su estado sólido. Esto lo vamos a apreciar tanto para enfriar el contenido de la nevera portátil que llevamos al campo o a la playa, como para también ponerlo de aquellas bebidas que se nos antoje tomar debajo del sol.
No te quedes sin hielo y sigue estos útiles consejos
El primer paso será hervir el agua y vas a observar que nos soporta más el hielo. Esto es así debido a que el número de burbujas que se crean dentro suyo bajan de forma considerable. De este modo, el mismo va a durar por mucho más tiempo sin perder su estado. Resulta que las partículas de agua caliente se mueven más rápido y se desprenden antes del calor, por lo que el estado avanza más rápidamente.
Otro truco simple es que uses sal gruesa, aquella que sueles tener en tu cocina, para que el agua congelada se conserve durante más horas. Solamente te va a alcanzar con meter los cubitos en un vaso con agua y el cloruro de sodio. Esta combinación sirve para conformar una reacción, la cual absorberá energía en forma de calor y el frío se conservará durante más tiempo. La ciencia nuevamente lo explica de forma detallada, pero sencilla.
Que el hielo nunca te falte: ¡Hay más consejos!
Un truco muy sencillo que podrás hacer se basa en tomar una toalla húmeda y envolver el exterior de la nevera o forrar su interior con ella. ¿Qué pasará con todo esto? Vas a poder aislar el hielo de la temperatura exterior y por ende, tener más cubitos. Otro método bastante usado pasa por forrar las paredes de la nevera con papel de burbujas e introducir la toalla con bastante agua, cual sea que elijas verás cómo resulta.
Por otro lado y si nada de lo que te dijimos con anterioridad te convence, puedes usar papel de aluminio para tener más hielo durante horas. Este material consigue mantener el frío, y por lo tanto, el cubo no se va a deshacer con tanta facilidad, aunque de todas formas será inevitable. Por otro lado puedes envolver las latas y botellas con el papel de aluminio, lo que las enfriará más rápido sin la necesidad de usar este derivado del agua, en forma de pequeños dados.