La Costa Brava, con su impresionante paisaje costero y su rica historia, ofrece innumerables oportunidades para capturar momentos perfectos a través de las selfies. Entre los muchos lugares dignos de una selfie, destacan el Mirador de S’Agaró, la Cala de l’Illa Roja, el Templet de Linné, la Cala dels Frares y el Far de Sant Sebastià. A continuación, exploraremos tres de estos lugares emblemáticos, ideales para inmortalizar tus mejores recuerdos.
3Templet de Linné: belleza clásica en Blanes
En el corazón del Jardín Botánico Marimurtra en Blanes se encuentra el Templet de Linné, una joya arquitectónica que parece transportarte a las Islas Griegas. Esta estructura clásica, con sus columnas y cúpula, está situada sobre un acantilado, ofreciendo una de las vistas más espectaculares de la Costa Brava.
El Jardín Botánico en sí es un lugar de increíble belleza, pero el Templet de Linné es, sin duda, su punto culminante. Desde aquí, puedes capturar no solo la belleza de la construcción sino también el vasto horizonte del Mediterráneo. Es un lugar que no puedes dejar de visitar si quieres llevarte una selfie digna de ser enmarcada.
La Costa Brava es un destino que combina paisajes naturales impresionantes con arquitectura histórica y rincones encantadores. Ya sea que elijas el Mirador de S’Agaró, la Cala de l’Illa Roja o el Templet de Linné, cada uno de estos lugares te brindará la oportunidad de capturar selfies que reflejen la esencia y la belleza de esta maravillosa región. ¡No olvides tu cámara y prepárate para explorar y fotografiar algunos de los escenarios más impresionantes de la Costa Brava!
