La cultura popular española cuenta con numerosas referencias icónicas que han dejado una huella imborrable en el imaginario colectivo. Entre estas, la obra del ya difunto Francisco Ibáñez, 13 Rue del Percebe, ocupa un lugar especial. Esta serie de historietas, que comenzó a publicarse en 1961 en la revista Tío Vivo, es reconocida por su humor fresco y su innovadora representación de la vida cotidiana en una comunidad de vecinos.
A lo largo de los años, 13 Rue del Percebe no solo ha deleitado a generaciones de lectores, sino que también ha ejercido una influencia indirecta pero significativa en la creación de series de televisión españolas exitosas como Aquí no hay quien viva y La que se avecina, comedias vecinales donde el edificio juega un papel fundamental.
1Recordando ’13 Rue del Percebe’ de Francisco Ibáñez
13 Rue del Percebe se presentó como una visión en corte transversal de un edificio de apartamentos, permitiendo al lector observar simultáneamente la vida y las peripecias de sus diversos habitantes. Cada piso y local comercial del edificio tiene sus propios personajes únicos y situaciones cómicas, creando un microcosmos de la sociedad urbana española de la época.
Entre los personajes más emblemáticos se encuentran:
- El ratón y el gato del desván, siempre en una eterna persecución.
- El científico loco, cuyas invenciones absurdas y peligrosas son fuente constante de risas.
- El tendero, un hombre sin escrúpulos que intenta estafar a sus clientes.
- El ladrón del segundo piso, siempre buscando maneras de robar a sus vecinos.
- La portera chismosa, figura central que conecta las historias de todos los vecinos con su constante espionaje y habladurías.
Esta estructura coral, donde cada piso del edificio alberga una historia distinta pero interconectada, es uno de los elementos que hace de 13 Rue del Percebe una obra tan especial y que más adelante influenciaría a series televisivas.