La liquidez del mercado se refiere a la facilidad con la que un activo puede convertirse en efectivo con poca o ninguna pérdida de valor. Dicho de forma más sencilla, es la rapidez con la que se puede cambiar un activo por su equivalente en efectivo. Se define como la capacidad de un valor para venderse rápidamente sin reducir su precio en el mercado abierto. Cuanto más líquido sea un valor, más fácil será que se realice esta transacción, lo que significa que se producirá un menor deslizamiento entre el precio de demanda y el precio de oferta cuando compre o venda. Dado que la liquidez del mercado está directamente relacionada con el tamaño del mismo, en general, los mercados más grandes y consolidados tendrán una liquidez elevada.
Son muchos los factores que pueden provocar una menor o escasa liquidez en el mercado, pero dos de los más comunes son la disminución de compradores y vendedores en el mercado o el aumento de los costes de transacción. Si la gente no está dispuesta a comprar o vender activos, no puede participar en las transacciones, lo que significa que nadie podría comprar a su precio de demanda o vender a su precio de oferta. Además, el coste es importante cuando se piensa en el volumen de negociación. El aumento de los costes de transacción (como el diferencial) reducirá la liquidez del mercado, ya que la gente no está dispuesta a comprar o vender a esos precios por miedo a perder dinero. Es importante tener en cuenta que los costes de transacción pueden fluctuar sustancialmente en función de cómo estén regulados los mercados de divisas digitales de su país.
Hay dos formas habituales de medir la liquidez del mercado: el índice de rotación y el volumen. El volumen es el número de acciones, contratos de futuros o unidades de divisas negociadas en un valor o en todo un mercado durante un periodo de tiempo determinado. El coeficiente de rotación es el total de ventas de todos los valores de un mercado o cartera dividido por su capital básico medio a lo largo de un año. Aunque estos métodos pueden proporcionar información útil sobre la liquidez del mercado, no ofrecen información sobre la facilidad para realizar transacciones con sus activos. Por este motivo, se suelen utilizar más como puntos de referencia (máximos/mínimos) con fines comparativos que como mediciones precisas.
Un mercado líquido es bueno porque le da libertad para entrar y salir de sus posiciones cuando lo necesite. Si un mercado carece de liquidez, tendrá dificultades para entrar o salir de una posición porque otros inversores no estarán dispuestos a comprarle o venderle a precios aceptables. Esto puede provocar un deslizamiento significativo, que le hará perder dinero si se ve obligado a cerrar su posición rápidamente. Para que sus activos mantengan su valor, debe existir una cantidad adecuada de liquidez en cualquier mercado en el que decida operar. También hay que tener en cuenta que los distintos tipos de activos varían mucho en cuanto a liquidez; algunos mercados pueden ser relativamente ilíquidos, mientras que otros son muy líquidos. Además, la liquidez puede cambiar drásticamente a lo largo de un día e incluso de una semana.
Los proveedores de liquidez de divisas son intermediarios que compran y venden activos para aprovechar las discrepancias de precios. La cantidad de liquidez en los mercados depende de lo activos que sean estos intermediarios, por lo que un alto nivel de participación puede hacer que los precios se mantengan relativamente bajos independientemente de la demanda. Esto se debe a que si hay muchos participantes, cada inversor tendrá un impacto insignificante en el mercado global.
Si no hay proveedores de liquidez, el volumen de operaciones disminuirá porque nadie está dispuesto a comprar a sus precios ni a vender a sus ofertas. Esto también puede hacer que los costes de transacción (como el diferencial) aumenten significativamente debido a la falta de compradores y vendedores disponibles en el mercado.
El deslizamiento será mucho más probable cuando intente entrar o salir de una posición en este tipo de mercado porque la liquidez es baja. Por lo tanto, los mejores proveedores de liquidez necesitan mantener buenos niveles de participación para mantener bajos tanto los costes de transacción como la volatilidad.
Como hemos dicho antes, los proveedores de liquidez en Forex se benefician de las operaciones comprando y vendiendo activos en torno a las discrepancias de precios. Cuanto más volátil sea un activo, mayores serán sus beneficios potenciales debido a las mayores oportunidades de realizar operaciones rápidas. Sin embargo, la volatilidad también puede conducir a mayores niveles de deslizamiento, lo que conduce a costes de transacción que reducen los beneficios globales obtenidos de esta estrategia. Además, los proveedores de liquidez de Forex pueden beneficiarse de las tendencias de los precios proporcionando liquidez tanto a la parte alcista como a la bajista del rango de negociación de un activo.
La liquidez es una característica esencial de cualquier mercado porque afecta a sus posiciones de entrada y salida. Por ello, la liquidez de los activos con los que opere desempeñará un papel importante a la hora de determinar lo rentable o no que le resulta mantenerlos. Por lo tanto, es aconsejable que cualquier inversor elija mercados con la liquidez adecuada para asegurarse de que sus activos mantienen su valor a lo largo del tiempo. Las acciones y las divisas tienen una gran liquidez porque pueden venderse y comprarse rápida y fácilmente sin sufrir demasiados desvíos debidos a las comisiones de transacción.
