La enfermedad de Alzheimer, una de las formas más comunes de demencia, afecta a millones de personas en todo el mundo. Con el número de casos previstos para triplicarse para 2050, la búsqueda de estrategias preventivas es más urgente que nunca. Entre las diversas intervenciones, el consumo regular de aceite de oliva virgen extra (AOVE) se destaca como una medida prometedora para proteger el cerebro y prevenir esta devastadora enfermedad. A continuación, exploramos cómo este componente esencial de la dieta mediterránea puede ayudar a preservar la salud cognitiva.
3Evidencia científica: el aceite de oliva y la memoria
Investigaciones recientes, como las realizadas por la Facultad de Medicina Lewis Katz de la Universidad de Temple, han revelado que el AOVE no solo beneficia la salud cardiovascular, sino que también preserva la memoria y protege contra el Alzheimer.
En estudios con modelos animales, se ha observado que el AOVE protege las sinapsis, las uniones donde las neuronas intercambian información, lo que es crucial para el funcionamiento cognitivo. El aceite de oliva virgen extra parece tener la capacidad de prevenir la demencia frontotemporal, una condición que afecta áreas del cerebro cercanas a la frente y las orejas, además de la enfermedad de Alzheimer, que afecta principalmente el hipocampo.
El consumo regular de aceite de oliva virgen extra, como parte integral de la dieta mediterránea, ofrece una prometedora estrategia para la prevención del Alzheimer. Los compuestos fenólicos presentes en el AOVE, como la oleuropeína y el oleocantal, actúan directamente sobre los mecanismos patológicos de la enfermedad, reduciendo la formación de placas de beta-amiloide y protegiendo las neuronas. Adoptar esta dieta no solo beneficia la salud cardiovascular y combate el cáncer, sino que también podría ser una clave esencial para mantener una mente sana y activa a lo largo de los años.