La última moda macabra es utilizar la IA para «resucitar» personas

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Uno de los usos más controvertidos de la inteligencia artificial está vinculado con la «resurrección» de personas. A mediados de febrero, se presentó la iniciativa The Shotline, un programa que empleó esta tecnología para recrear las voces de niños y adolescentes asesinados en colegios e institutos de Estados Unidos. Como era de esperar, esta acción generó una gran polémica, a pesar de que contaba con el permiso de los familiares para llevarla a cabo.

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Suplantación en redes sociales

La IA también facilita la creación de perfiles falsos en redes sociales que imitan a personas reales. Utilizando datos públicos y fotos, los algoritmos pueden generar perfiles que parecen auténticos a simple vista. Estos perfiles pueden ser utilizados para estafas, manipulación emocional y fraude financiero.

Por ejemplo, un perfil falso puede contactar a amigos y familiares de la persona suplantada, solicitando dinero o información personal. La credibilidad de estos perfiles puede engañar incluso a los usuarios más cautelosos, provocando pérdidas financieras y emocionales significativas.