Iñaki Williams se despidió en San Mamés con un emotivo mensaje para Iker Muniain

El Athletic de Iñaki Williams, Ernesto Valverde y compañía despidió en San Mamés a Iker Muniain. En torno a 20.000 personas se han dado cita en La Catedral para rendir homenaje a un futbolista que este próximo mes de junio pondrá fin a dos décadas en el club. Un club, el Athletic, al que llegó cuando tan solo tenía doce años y que abandonará con 31 y 559 partidos oficiales disputados con el primer equipo.

La despedida ha congregado en San Mamés a toda la primera plantilla masculina y a una amplísima representación del resto de equipos que conforman la familia rojiblanca. Parte de ellos le han recibido sobre el césped formando un pasillo a su llegada, cuando ha saltado al verde acompañado por sus dos hijos. Ahí es donde ha hablado Iñaki Williams, compañero e íntimo amigo de Iker Muniain.

Iñaki Williams, compañero e íntimo amigo de Iker Muniain

Durante más de una hora, y con distintos invitados que han acompañado en escena al navarro, se ha repasado su trayectoria deportiva. Uno de los mensajes más emotivos ha sido el que ha protagonizado Iñaki Williams, uno de los mejores y más íntimos amigos de Muniain, antes y después de esta sonada despedida al capitán del Athletic.

«Estamos muy orgullosos de toda tu carrera, de lo que has transmitido, de lo que nos has dado siempre, de ser tu hermano y de poder decir que he conocido a Iker Muniain y que he jugado con él», se refirió el mayor de los Williams. El delantero rojiblanco siempre ha puesto en valor la calidad de su capitán, pero sobre todo su amistad.

La Copa, su mejor momento

Uno de los momentos cumbre se ha producido cuando el capitán ha recordado lo que supuso ganar la Copa del Rey el pasado mes de abril. «Fue una de las cosas más surrealistas que he vivido en mi vida. Desde que logramos levantar la Copa en La Cartuja hasta el día de la comida en Bilbao, que salimos a la calle e hicimos una fiesta muy bonita con la gente que se nos unió por la calle», ha confesado.

El futbolista, junto a Iñaki Williams y el resto de sus compañeros, fue vestido de traje oscuro y corbata, saltó al campo de la mano de sus dos hijos atravesando el pasillo de aplausos que le hicieron sus compañeros, estos todos con camisetas con el 10 y el nombre de Muniain a la espalda. Un final de la etapa de Iker Muniain en el Athletic del que, ahora, queda por descubrir cuál es su próximo destino.