Andreiy Lunin no tiene claro si lo mejor es seguir vistiendo la camiseta del Real Madrid
La renovación de Lunin por el Real Madrid se acerca, pero no está cerrada ni mucho menos. Los dirigentes del club blanco lo tienen claro y pretenden atar al portero con un contrato de larga duración. Saben que con Courtois y el ucranio la portería madridista estaría cubierta durante un tiempo sin mayor problema.
Sin embargo, Andreiy Lunin tampoco está tan convencido como quisiera. Y es que el técnico madridista, Carlo Ancelotti, debido a la recuperación de Courtois, está barajando seriamente que sea el belga el portero de la final de la Champions ante el Borussia Dortmund. Sin embargo, el croata cree que ese puesto debe ser suyo por su buen hacer durante la mayor del tiempo, por ejemplo, ante el Manchester City.
Ancelotti sopesa que Courtois sea el portero de la final de la Champions y Lunin cree que ese puesto debe ser suyo
Andriy Lunin inició la temporada sin ninguna perspectiva de futuro en el Real Madrid. Al terminar la pasada campaña estuvo cerca de abandonar el club blanco. Todo hacía indicar que podía estar ante la última temporada de blanco pese a tener contrato hasta el 30 de junio de 2025, pero el portero ha sabido esperar, trabajar y ganarse esa posibilidad de renovar con su rendimiento entre los tres palos tanto en liga como en la Champions.
Si Lunin no renueva, tiene ofertas para salir
Si Lunin no acepta la renovación, el Real Madrid asumirá su traspaso e irá al mercado en busca de otro portero. Y ahí el club blanco seguro que haría un gran negocio porque el ucraniano costó 8,5 millones en el verano de 2018 y seis años después el Real Madrid podría multiplicar por tres o cuatro veces lo que pagó.
Es el jugador que menos gana de la primera plantilla y el club blanco está dispuesto a mejorar sensiblemente sus condiciones económicas, y lo cierto es que lo puede hacer con varias ofertas sobre la mesa, entre ellas la del Manchester United. Pero el ucraniano no tiene claro si la mejor decisión para su futuro es seguir vestido de blanco, más sabiendo que Courtois, cuando está de vuelta, no parecer tener rival en la portería.