El drama turco «Pecado Original» continúa con su vertiginosa trama, manteniendo a los espectadores en vilo con cada giro y revelación. En el episodio del viernes 10 de mayo, se despliegan nuevas tensiones y desafíos que ponen a prueba los lazos matrimoniales de Yildiz y Çagatay.
3Avance del capítulo del viernes 10 de mayo de «Pecado Original»
Seis meses han transcurrido desde la trágica muerte de Hasan Ali, y la vida en «Pecado Original» ha dado un vuelco. Çagatay, sumido en el dolor y la culpa, responsabiliza a Yildiz por el fatídico destino de su padre. La sombra del pasado sigue oscureciendo su relación, ya que Çagatay la culpa de haber estado en la mansión el día del atentado gracias a un plan urdido por ella.
Ender, en un intento de huir de los recuerdos dolorosos, se marchó a Reino Unido con Kaya. Feride también optó por dejar Estambul, y Zehra, sintiéndose sin ataduras tras la partida de sus hermanos y la pérdida de su padre, desapareció del radar, marchándose al extranjero.
Sin embargo, el regreso de Ender sacude nuevamente los cimientos de la trama. De vuelta en Turquía, sin alianza en su dedo y con un anuncio inesperado: se ha divorciado. La vida en Inglaterra no llenaba el vacío en su corazón, mientras que Kaya anhelaba un estilo de vida distinto, lo que los llevó a separarse.
Ender busca reconstruir su vida profesional, deseando retomar las riendas de la empresa, que ha sufrido pérdidas durante su ausencia. Yildiz, enterada de su regreso, acude a visitarla, rememorando juntas el fatídico día que cambió sus vidas para siempre. La relación entre ambas sigue tensa, marcada por resentimientos y reproches.
Mientras tanto, Çagatay se enfrenta a su propio duelo y al desmoronamiento de su imperio empresarial. Con la partida de Feride, se encuentra más solo que nunca. Yildiz intenta animar su espíritu organizando una fiesta, pero solo logra sumirlo en una mayor melancolía.
Çagatay, decidido a romper con su pasado, se refugia en la compañía de Feyza, su amiga y colega, con quien mantiene una conexión más fluida que con Yildiz. Aunque Feyza ha negado en repetidas ocasiones que su hijo sea de Çagatay, este no puede evitar que la duda lo asalte de vez en cuando.
Mientras la noche avanza, Çagatay se sume en una profunda desmotivación ante la perspectiva de la fiesta. Yildiz, empeñada en emular a su vecina Kumru, una figura joven y famosa, solo logra exacerbar su mal humor. Ender, observadora de los cambios que han sacudido a todos en los últimos meses, no puede evitar notar la cercanía entre Çagatay y Feyza, así como la atención que Kumru parece dispensarle.