Luka Modric no lleva tan bien las suplencias como nos quieren hacer creer
Esta temporada hemos podido ver a Luka Modric más veces sentado en el banquillo que sobre el césped, una situación que no ha gustado demasiado al jugador croata, acostumbrado a disputar el máximo de minutos posibles. Desde el Real Madrid han querido hacer ver que no existía ningún tipo de problema, sin embargo, las cosas han caído por su propio peso.
Así, han sido varios los encontronazos que el ’10’ ha tenido tanto con Ancelotti como con el club. De hecho, a comienzos de año se llegó a decir que Luka Modric estaba arrepentido de haber renovado con el conjunto blanco. Ahora, con el final de la temporada a la vuelta de la esquina el culebrón sobre su continuidad vuelve a salir a flote.
El rol de suplente no va con Luka Modric
Luka Modric está muy molesto con su situación actual en el Real Madrid donde su rol ha quedado relegado al de suplente. De hecho, a pesar de haber diputado 28 de los 33 partidos de liga, solo en 15 lo ha hecho como titular y su media de tiempo jugado apenas supera los 50 minutos por encuentro, cifras muy alejadas de las de temporadas pasadas.
Pese a que públicamente no se le han visto grandes aspavientos, este nuevo rol no tiene nada que ver con lo que se le había prometido en el momento de renovar para este curso 2023-24. Y es que, no podemos olvidar que el croata tenía importantes ofertas sobre la mesa de equipos en los que seguiría siendo importantes o, en su defecto, ofertas de Arabia Saudí donde podría encontrar su ‘retiro dorado’.
El adiós de un mito
Si duro fue el momento en el que Cristiano Ronaldo se despidió del Real Madrid, duro va a ser el día que Luka Modric haga lo propio y, según parece, ese momento está más cerca de lo esperado. Y es que, a medida que se acerca el final de temporada también se acerca el momento en el que el croata debe decidir sobre su continuidad o si pone punto y final a su relación con el club blanco.
Así, cerca de cumplir 39 años, el Real Madrid no parece que vaya a hacer una oferta de renovación, y menos cuando quiere consolidar a Tchouaméni, Camavinga, Fede Valverde y Bellingham en el centro del campo. Además, tampoco vemos a Luka Modric aguantando un año más con ese rol de suplente. Por ello, el adiós de un mito parece inminente.