Frente al alarmante repunte de la siniestralidad vial en los primeros meses de 2024, la Dirección General de Tráfico (DGT) ha decidido tomar medidas drásticas. Entre los planes anunciados destaca el retorno de las motos camufladas, un recurso empleado desde 2022, pero que ahora se reforzará para controlar a uno de los colectivos más vulnerables: los motoristas. Asimismo, se intensificarán los controles en autovías y autopistas, especialmente en zonas críticas como Andalucía y la Comunidad Valenciana. En este artículo te contaremos donde se suelen poner las motos de la DGT y hablaremos de su función. ¡No te lo pierdas!
2El retorno de las motos camufladas de la DGT
Aunque las motos camufladas de la DGT llevan operando desde 2022, su papel en el plan de choque adquiere una especial relevancia. Estos vehículos, empleados por primera vez de forma «oficial» en la Operación Salida de Verano de 2022 como prueba piloto, tienen como objetivo reforzar el control sobre los motoristas, uno de los colectivos más vulnerables y con mayor siniestralidad en nuestro país.
De hecho, uno de los datos que más ha alarmado a los responsables de la DGT es el incremento de motoristas fallecidos en autopista y autovía durante los primeros meses del año. Esta preocupante tendencia ha llevado a la DGT a decidir emplear este método de control, menos detectable para los conductores, en las zonas con mayor siniestralidad de motocicletas.
Las motos camufladas, al pasar más desapercibidas que los vehículos convencionales de la DGT, permiten una vigilancia más eficaz y discreta de las infracciones cometidas por los motoristas. Su presencia en las carreteras busca generar un efecto disuasorio, incentivando a los conductores a respetar las normas de circulación y evitar comportamientos temerarios que puedan poner en riesgo su seguridad y la de los demás usuarios de las vías.