Desde su apresurada salida de Zarzuela, Juan Carlos ha planteado todo un desafío para su hijo Felipe VI, Letizia y la familia real en pleno. Tras los escándalos asociados a su reinado, una figura muy susceptible ha sido el de la princesa Leonor, la futura reina y de quien se ha buscado proteger su imagen a como de lugar, llegando a apartarla significativamente de la imagen de su abuelo.
Actualmente, cuando la princesa se encuentra recibiendo su formación militar en la Academia Militar de Zaragoza, cualquier cosa puede suceder, especialmente en lo que concierne a su relación con el rey emérito, mismo que, tal como ella, tuvo la oportunidad de formarse en armas.
1Las visitas constantes de Juan Carlos comienzan a levantar inquietudes en Zarzuela
La causa de la abdicación prematura de Juan Carlos I fue presionada por la necesidad de dejar paso a una nueva generación y garantizar la estabilidad de la monarquía; además, según expertos juristas, la abdicación fue la única posibilidad para exigir responsabilidad al rey emérito por actos particulares, ya que con la abdicación perdió la inmunidad que lo protegía.
Juan Carlos I tomó la decisión de abdicar el 5 de enero de 2014, el día de su 76 cumpleaños, y la anunció oficialmente el 2 de junio de ese mismo año, después de las elecciones europeas, para no entorpecer el debate electoral, y la abdicación se hizo efectiva con la promulgación de la Ley Orgánica 3/2014 el 18 de junio de 2014.
Tras abdicar, Juan Carlos I se trasladó a Abu Dabi por las mismas razones que buscan mantener la monarquía; es por esta razón que tiene prohibido pernoctar en Zarzuela; sin embargo, últimamente al emérito se le ha visto de forma muy seguida en España, casualmente, después del escándalo desatado por Jaime del Burgo en su cuenta X, sobre la supuesta infidelidad de la reina Letizia; y estas visitas cada vez más frecuentes, comienzan a generar inquietud.