En un escenario donde la seguridad vial y el cumplimiento de las normas de tráfico son de vital importancia, los radares de velocidad desempeñan un papel fundamental. Sin embargo, en algunas ocasiones, estos dispositivos de la Dirección General de Tráfico (DGT) parecen trascender su función original y convertirse en auténticas máquinas de hacer dinero. Este es el caso de tres radares en Cataluña que, en el año 2022, acumularon una impresionante cifra de multas y una recaudación que alcanzó los 17 millones de euros.
Según los datos revelados por el Servei Català de Trànsit (SCT), estos tres cinemómetros fueron responsables de imponer el 20% de las sanciones por exceso de velocidad en la región durante el año 2022. Un porcentaje significativo que pone de manifiesto su eficacia, pero también genera interrogantes sobre la verdadera motivación detrás de su implementación. En este artículo brindaremos la ubicación de estos radares y te explicaremos que puntos debes tener en cuenta para no ser sancionado.
4La C-17 en Barcelona: Un nuevo jugador en el campo
Cerrando el podio se encuentra un radar fijo en la provincia de Barcelona, que controla la velocidad en la C-17, en el km 42,6 a la altura de Centelles y en sentido hacia la capital catalana. Este dispositivo, relativamente nuevo, entró en funcionamiento en la primavera de 2021 y en el año 2022 impuso 36.099 multas, recaudando 3,8 millones de euros.