Son infinitos los concursos que actualmente hay en televisión cuyo premio final es dinero, un coche, una cesta de Navidad o incluso un viaje. Pero también que nada es completamente gratis y hay que recordar que Hacienda siempre gana en estas situaciones porque todo hay que declararlo. Desde Pasapalabra, Quién quiere ser millonario, La Ruleta de la suerte y tantos otros.
Y es que el premio de un concurso de televisión tributa en el impuesto de la renta porque es considerado una ganancia patrimonial. Concretamente se clasifica como una ganancia patrimonial que no deriva de la transmisión de elementos patrimoniales (como podría ser la venta de una vivienda).
EN ESTA RENTA 2023, HACIENDA ESPERA RECAUDAR EN TOTAL UN 12%
En general, para este año, el fisco se ha marcado como expectativa recaudar un total de 18.908 millones, es decir, 2.052 millones más (un alza del 12%) que los que se obtuvieron durante la campaña del año pasado.
Un aumento de la recaudación que se explica por el aumento de las rentas del capital y que viene impulsado por la falta de actualización de las tarifas estatales del IRPF para reflejar el aumento de la inflación o los salarios. Es decir, la no deflactación del impuesto.
De hecho, el tipo que se aplica a este tipo de ingresos se ha incrementado en algunos tramos. Esto también tiene relación directa con los concursos de la televisión.
HACIENDA SIGUE GANANDO: LA GANANCIA DE PREMIOS COMO EL DE PASAPALABRA ENTRA EN LA BASE GENERAL DEL IRPF
Como explican desde el Ministerio, dicha ganancia patrimonial suma dentro de la base imponible general del IRPF junto con los rendimientos del trabajo y los de actividades económicas, con los del capital inmobiliario y con los del capital mobiliario que no forman parte de la base del ahorro y con las rentas imputadas.
La fiscalidad de los concursos en televisión es bastante sencilla. El dinero que reciben los ganadores se considera una ganancia patrimonial y, por tanto, tributa como IRPF dentro de las tablas generales de la renta.
En el caso de los premios en metálico, como el que se puede conseguir en Pasapalabra, por ejemplo, el dinero que consigan se suma a los ingresos que se tienen en el momento en el que empiezan a concursar. Entonces, el dinero tributará al tipo general del IRPF en el que se encuentre el concursante.
CUANTO MAYOR SEA EL BOTE, MÁS DINERO SE LLEVA HACIENDA
Así, las tablas se aplican de forma progresiva, de forma que cuanto mayor sea el bote, más dinero se llevará Hacienda. Lo mismo ocurre con nuestro salario cuando participamos en el concurso: si el sueldo de partida es grande, el porcentaje al que tributará el premio también lo será.
Puede ocurrir que en los concursos de televisión el premio no siempre sea en metálico. Por ejemplo, en La Ruleta de la suerte, de Antena 3, la búsqueda más cotizada por los concursantes, en el panel final, es el coche; aunque, en este programa alguno ha intentado hacer, en alguna ocasión, trampa.
Si se diese que el premio es un coche o un chalet en alguno de los idílicos lugares de la costa española, le corresponde a la productora otorgar un valor económico a ese bien. Finalmente, esa cantidad sumará como ganancia patrimonial en la Renta, por lo que la situación es igual a si el premio es una cantidad monetaria.
EL CASO DE NAIARA Y OPERACIÓN TRIUNFO
Un ejemplo muy práctico lo tenemos, además de con Pasapalabra o La Ruleta de la suerte, con Operación Triunfo. Más concretamente con Naiara, ganadora del concurso. Lo hizo llevándose 3.000 euros por cada gala en la que ha sido favorita (3 veces en total) y 100.000 euros por haber ganado el concurso.
Además, como el IRPF es un impuesto progresivo, se aplicarán distintos porcentajes en función de los tramos que correspondan a cada caso. Esto quiere decir que hay que tener en cuenta tres aspectos:
- La cuantía del premio
- Los ingresos
- La Comunidad Autónoma en la que resida el contribuyente, ya que esta última hará que también varíe el tipo aplicable.
O lo que es lo mismo; de ese premio de 100.000 euros, Hacienda ha terminado por llevarse 19.448,50 euros de este premio y la Hacienda autonómica de Aragón unos 20.216,04 euros. En total, ambos organismos se quedarán con 39.664,54 euros.
LA CANTIDAD VARÍA EN FUNCIÓN DE LA COMUNIDAD AUTÓNOMA
La mejor forma de ver el impacto de los impuestos en un premio de la televisión es con un caso práctico. Un total de 6,5 millones de euros es el mayor premio entregado en ‘¡Boom!’, con Los Lobos.
En este caso, y conseguidos en la ronda final, los impuestos que pagaron cada uno de los concursantes varió sustancialmente en función de su comunidad de residencia.
La diferencia entre el tipo marginal que tuvo que afrontar cada uno tiene la culpa. Erundino, residente el Guadalajara, pagó sobre un tipo máximo del 44%, mientras que el de Alberto, de Jaén fue del 46,6%. Valentín, de Alicante, tributó a un tipo máximo del 47,3% y Manu, de Navarra, a un tipo del 50,8%. Traducido en euros, esto supone una diferencia cercana a los 100.000 euros en impuestos entre unos y otros.
