El sofrito es la base de muchos platos tradicionales en la cocina mediterránea y más allá. Es el primer paso para infundir sabor en el arroz y otros guisos, añadiendo profundidad y complejidad a cada bocado. A continuación, aprenderemos a prepararlo paso a paso, discutiremos sus variaciones, con qué platos debemos utilizarlo y los mejores acompañamientos para disfrutar de este clásico de la cocina.
Antes de ir con la receta, hay que decir que el sofrito tiene sus raíces en la cocina mediterránea, donde se ha utilizado durante siglos para realzar el sabor de diversos platos. Se cree que los romanos fueron los primeros en utilizar una combinación de aceite, ajo y hierbas aromáticas para condimentar sus alimentos.
Con el tiempo, el sofrito evolucionó y se adaptó a las diferentes regiones y culturas. En España, por ejemplo, se incorporaron ingredientes como cebolla, pimiento y tomate para crear el famoso sofrito español, una mezcla rica y sabrosa que forma la base de muchos platos tradicionales, incluido el arroz.
Vamos a ver cómo prepararlo adecuadamente.
2Variaciones del sofrito
El sofrito es una receta versátil que se presta a un abanico de variaciones según los gustos y preferencias personales. Aquí tienes algunas ideas para experimentar:
- Vegetariano: Omitir el ajo y agregar más verduras, como zanahorias, apio y champiñones, para una versión vegetariana del sofrito.
- Mediterráneo: Añadir aceitunas negras, alcaparras y anchoas picadas para un toque mediterráneo.
- Picante: Incorporar chiles picados o una pizca de pimentón picante para un sofrito con un toque de calor.
Estas son solo algunas de las muchas variaciones que puedes probar para darle tu toque personal al sofrito.