La catedral de Notre Dame siempre fue uno de los puntos turísticos más visitados de Francia, siendo casi una de las paradas obligadas de cualquier recorrida. Su historia, belleza y fama la han dejado en ese sitio de privilegio, digna de millones de fotos guardadas para la posteridad. Es por eso que en la primavera del año 2019, el mundo entero se horrorizó cuando esta sencillamente se incendió.
Las llamas eran tan grandes que se temía un derrumbe total de esta belleza arquitectónica que data del año 1163, algo que el país galo lamentaría por siempre. En un principio se sospechaba de que dicho incendio había sido intencional, temiendo que se tratase de un atentado. Pero las investigaciones que vinieron más adelante concluyeron que fue meramente una falla humana de los trabajadores.
Las consecuencias del incendio de la catedral de Notre Dame
Se sospecha de una chispa o un fallo eléctrico, pero la hipótesis de algo mal intencionado quedó completamente de lado. Cuando comenzó todo eran cerca de las 18:30 horas en Francia, y faltaba poco para el inicio de una misa. No se veía ningún signo de fuego cuando la alarma comenzó a sonar, por lo que la evacuación tardó más de lo debido. Esto hizo que las llamas posteriormente avancen bastante.
El fuego perduró casi 10 horas en la catedral de Notre Dame, la cual está confeccionada en gran parte por madera vieja en su tejado. Sin embargo, el gran trabajo de los bomberos hizo que se evitara el derrumbe completo de la misma, aunque las pérdidas fueron significativas: Se habla de unos 130 millones de euros al día de la fecha, entre restauraciones y demás gastos.
El resurgir de Notre-Dame tras su brutal incendio en 2019
Ese 15 de abril quedará grabado en la memoria de muchos, sobre todo de aquellos que tuvieron la oportunidad de conocerla, o bien, son amantes de su historia. Para evitar su deterioro, rápidamente el gobierno francés se puso manos a la obra con el único objetivo de que la catedral de Notre Dame abra nuevamente sus puertas, aunque sabían que ello llevaría un largo tiempo.
Luego de cinco años de trabajos, finalmente se fijó una fecha de reapertura: Será el próximo 7 de diciembre y con la entrega del edificio por el Estado francés, su propietario tras la expropiación, a la Iglesia católica en Francia, que es su cesionario. En la recuperación de la catedral se utilizan materiales idénticos al original como la madera de roble, el plomo y demás. Una vez habilitada, estará lista nuevamente para ser recorrida.