Conducir tu coche es uno de los grandes placeres que tienen las personas, a menos claro que en medio del trayecto nos azote una fuerte lluvia. Esta precipitación a veces es subestimada por los conductores, quienes hacen exactamente lo mismo que harían durante un día normal, algo que es un evidente error: Los accidentes en gran parte suceden por tal motivo y son muy evitables.
El agua sobre la carretera reduce peligrosamente la visibilidad y adherencia de los neumáticos al suelo, lo que en maniobras peligrosas puede poner en riesgo la vida tanto de los peatones, ocupantes de otros vehículos y lógicamente, el auto en el que vas. Es por eso que a continuación te dejaremos algunos consejos más que efectivos, en donde puedes tomar nota para viajar tranquilo.
Tu coche puede andar de forma segura incluso bajo la lluvia
Reduce considerablemente la velocidad. Como ya mencionamos, el agua disminuye la adherencia entre los neumáticos y el asfalto. Es por eso que se deben hacer maniobras cuidadosas y se necesita una distancia mayor para detener el vehículo una vez que se pisó el freno. Las gomas del coche se deslizarán un trayecto mayor al normal y, si lo haces como de costumbre, puedes chocar.
Otro ítem interesante es chequear de que los cristales estén limpios, en especial el que se encuentra del lado de adentro. Además, las luces tienen que funcionar correctamente, algo que todos los días debe suceder, pero que en estos casos es crucial. Recuerda no utilizar las luces altas o auxiliares porque encandilan a conductores que vienen de frente o bien, estén delante de nosotros.
Otros útiles consejos para la correcta conducción de nuestro coche cuando llueve
El desempañante de vidrios también es clave. Para esto deberás encender el aire acondicionado y ponerlo en la temperatura que más te agrade. Regulando con las perillas, deberás apuntar el aire al parabrisas, mientras que el aire tiene que ingresar desde afuera y no re-circule. En caso de no tener un coche con este artefacto, simplemente baja el vidrio (soporta un poco de agua, pero llegarás bien a destino).
Otro método para evitar accidentes es mantener una distancia prudencial con el coche de adelante. Estar muy cerca del de adelante, sobre todo en rutas y autopistas, es una costumbre muy peligrosa. Se debe viajar a una distancia de entre 30 y 40 metros para, en caso de ser necesario, frenemos sin riesgos. No olvides tener neumáticos en buen estado, con buena vida útil e inflados.