La dirección europea de Ford ha transmitido al sindicato mayoritario en la fábrica de Almussafes (Valencia), UGT, que necesita un tiempo, aproximadamente dos meses, para poder concretar los volúmenes y fecha de fabricación del nuevo vehículo que producirá la planta, así como la plantilla que se requerirá, por lo que los representantes de los trabajadores han señalado que «la primera alternativa no puede ser otra que negociar un ERTE temporal» para proteger a la plantilla durante ese tiempo.
Así lo ha explicado el sindicato tras reunirse este miércoles en Colonia (Alemania) con la dirección europea de la compañía, un encuentro para abordar el compromiso adquirido por la multinacional el pasado 28 de marzo de que Almussafes fabricará un nuevo vehículo de pasajeros multienergía.
En un comunicado tras la reunión, UGT ha reiterado que la decisión por parte de la dirección a nivel mundial de incorporar un nuevo vehículo a la gama europea que se fabricará en Almussafes «va a permitir tener márgenes suficientes para buscar las soluciones idóneas hasta la fecha del lanzamiento de dicho vehículo, que a día de hoy todavía está por concretar». UGT calcula que los detalles podrán conocerse en dos meses aproximadamente
De confirmarse los plazos, UGT cree que «será del todo necesario implicar a las diferentes administraciones y gobiernos con el fin de activar el mecanismo RED llegado el momento».
Además, el sindicato mayoritario interpelará a la dirección de la planta «con el objetivo de que relance los Planes de Desarrollo de Carrera lo antes posible, recuperando así la normalidad en el día a día de la fábrica» independientemente de que haya en vigor algún ERTE».
En el espacio de estos dos meses, el sindicato continuará manteniendo contactos, tanto con el Comité de Empresa de Ford así como con la propia dirección europea y local, ha explicado.
El compromiso de la dirección mundial llega en un momento en el que la fábrica de Almussafes ha ampliado el Expediente de Regulación Temporal de Empleo (ERTE) que tiene en vigor hasta el próximo 19 de abril, debido a que el lanzamiento del modelo Kuga no aumentará su producción por «problemas de proveedores» hasta ese día. A ello se suma que el 17 de ese mes será el último día de producción de la furgoneta Transit, lo que iba a dejar a Almussafes solo con la fabricación del Kuga.
LA INCERTIDUMBRE ANTE LA ELECTRIFICACIÓN
La factoría ha hecho frente desde hace meses a la incertidumbre sobre la llegada de las inversiones necesarias para producir los vehículos eléctricos de la firma del óvalo. La fábrica valenciana fue elegida en 2022 para producir su nueva plataforma de vehículos eléctricos a partir de 2025, pero las inversiones necesarias para ello no se han materializado ni anunciado y el pasado mes de noviembre Ford comunicó que aplazaba «cualquier decisión que tenga que ver con inversiones».
Mientras no se inician las inversiones, la fábrica ha tenido que ajustar su producción ante la reducción de ventas. Este 17 de abril Ford Almussafes deja de fabricar la furgoneta Transit y el único modelo hasta la llegada de los nuevos eléctricos era el Kuga.
En principio, la electrificación debía asegurar la carga de trabajo en los próximos años en Almussafes y que llevó a un acuerdo con UGT para que el nuevo convenio de la compañía recogiese medidas salariales y de flexibilidad condicionadas a la electrificación. La adjudicación a Ford no evitó que se tuviera que redimensionar la plantilla con un ERE que ha afectado a 1.124 trabajadores.
La compañía se ha presentado a las dos líneas de la nueva convocatoria del Proyecto Estratégico para la Recuperación y Transformación Económica del Vehículo Eléctrico y Conectado (Perte VEC II). El Ministerio de Industria ha adjudicado 37,6 millones de euros procedentes de la línea de baterías para establecer una planta de ensamblaje de baterías en la fábrica de Almussafes y Ford también ha solicitado las ayudas destinadas a la cadena de valor del vehículo eléctrico.