La evolución tecnológica ha marcado hitos cruciales en la historia, y hace tres o cuatro décadas, los ordenadores personales emergieron como una revolución sin precedentes. Aunque no eran potentes por los estándares actuales, estos microordenadores de 8 bits jugaron un papel fundamental en la formación de una generación de entusiastas y hackers. En este recorrido, exploraremos los microordenadores hogareños más icónicos de esa época, que dejaron una huella imborrable en la historia de la tecnología.
7MSX: un intento de estandarización tecnológica
Aunque no es un microordenador en sí mismo, el estándar MSX propuesto por Microsoft en 1983 dejó una marca significativa. Con la ambición de unificar sistemas operativos y superar la fragmentación del mercado, MSX buscó crear una plataforma común para la diversa gama de fabricantes. Aunque no logró conquistar Estados Unidos, en otras partes del mundo, como Europa, Brasil, Chile, Argentina, Japón y Rusia, MSX dejó su huella al facilitar la compatibilidad y la accesibilidad.
