La evolución tecnológica ha marcado hitos cruciales en la historia, y hace tres o cuatro décadas, los ordenadores personales emergieron como una revolución sin precedentes. Aunque no eran potentes por los estándares actuales, estos microordenadores de 8 bits jugaron un papel fundamental en la formación de una generación de entusiastas y hackers. En este recorrido, exploraremos los microordenadores hogareños más icónicos de esa época, que dejaron una huella imborrable en la historia de la tecnología.
1Amstrad CPC: la competencia que conquistó Europa
En 1984, Alan Sugar, el cerebro detrás de Amstrad, presentó al mundo el modelo CPC 464. Basado en el microprocesador Zilog Z80 de 8 bits, este microordenador marcó el comienzo de una era. A pesar de sus modestos 3,7 MHz de velocidad y 64 Kbytes de RAM, el CPC 464 causó sensación al incluir una unidad de cinta para guardar programas en casetes de audio.