En los supermercados de nuestro país, los consumidores se enfrentan a una amplia variedad de opciones cuando se trata de elegir productos cárnicos procesados, como la pechuga de pavo cocida en lonchas. Sin embargo, no todas las marcas ofrecen la misma calidad y seguridad alimentaria. La Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha analizado detenidamente varias marcas de este popular producto y ha determinado cuáles son las que deben evitarse, basándose en criterios como el porcentaje de carne real, la cantidad de aditivos y sal, y la calidad general del producto. En este artículo te contaremos que marcas nunca debes comprar, pero también hablaremos de aquellas que son aprobadas por la OCU. ¡No te lo pierdas!
2El porcentaje de carne: un factor clave a considerar
Uno de los criterios más importantes a tener en cuenta al elegir una pechuga de pavo cocida es el porcentaje de carne real que contiene. Según el análisis de la OCU, este porcentaje puede variar significativamente entre las diferentes marcas, oscilando entre el 50% y el 95%. Aquellos productos que contienen un porcentaje más bajo de carne de pavo, como el 50%, 70% u 80%, suelen complementarse con una variedad de otros ingredientes, como agua, aditivos, almidón y féculas. Esto no solo afecta el valor nutricional del producto, sino también su sabor y textura. Por el contrario, las marcas que ofrecen un alto porcentaje de carne de pavo, como el 90% o más, suelen ser consideradas de mayor calidad y valor nutricional. Estas opciones brindan una fuente más pura y saludable de proteína, sin la necesidad de tantos aditivos o rellenos adicionales.