El ahorro de electricidad y la eficiencia energética se han convertido en prioridades en el continente europeo durante las últimas décadas por la necesidad de reducir la emisión de gases de efecto invernadero a la atmosfera. No obstante, en los últimos dos años se ha hecho aún más énfasis en la necesidad de evitar el derroche de electricidad ya que las materias primas para la generación de la misma (petróleo y gas natural) escasean a raíz de las tensiones geopolíticas existentes actualmente, que han venido tensionando fuertemente los mercados de la energía por momentos, como ocurriera durante el año 2022, que vio los precios de la electricidad dispararse hasta por seis comparado con niveles normales.
La producción de climatización (aire acondicionado, calefacción y agua caliente sanitaria) representa una gran parte del consumo de electricidad de los hogares en España. En los meses de frío, el uso de los sistemas de aire acondicionado en modo calor ofrece grandes oportunidades de ahorro energético. La implementación de medidas de ahorro energético como las siguientes permitirá controlar y reducir el consumo de electricidad por parte de los sistemas de aire acondicionado funcionando en modo calor durante las semanas de frío que quedan antes del comienzo de la temporada de calor:
- A la hora de reducir el consumo de electricidad por parte de los aparatos de aire acondicionado en modo calor durante los meses de frio, es fundamental asegurarse de que la vivienda cuenta con un buen aislamiento térmico que impida que el calor producido por el equipo de aire acondicionado se escape al exterior. Un aislamiento adecuado y el sellado de cualquier fuga en puertas y ventanas desempeñan un papel importante en el mantenimiento de la eficacia de los sistemas de climatización, tanto es así que el gobierno otorga actualmente subvenciones para obras de rehabilitación energética que mejoren el nivel de eficiencia energética y aislamiento térmico de las viviendas.
- El mantenimiento preventivo es clave para mantener a los equipos en condiciones de funcionamiento óptimas, para alargar la vida útil de los mismos y para evitar averías y asegurarse de que funcionan garantizando los mayor niveles de eficiencia energética. Es muy importante verificar que el sistema de refrigeración está funcionando con la cantidad adecuada de gas refrigerante y que no ha habido fugas o escapes del mismo en los circuitos de refrigeración, ya que esto significará que el aparato perderá eficiencia y tendrá que consumir más energía eléctrica para producir la misma cantidad de calor o frío.
- Si el aire acondicionado que se tiene instalado es antiguo (más de 15 años), probablemente no cuenta con un compresor Inverter y por lo tanto consumirá bastante más energía que los aires acondicionados más modernos, que cuentan con compresores Inverter. Los compresores Inverter tienen la capacidad de mantener la temperatura estable dentro de las estancias sin estar apagando y encendiendo permanentemente el compresor, ya que en lugar de hacer esto varían la velocidad del motor del compresor acelerándola cuando es necesario aumentar la temperatura dentro de las estancias y reduciéndola cuando la temperatura fijada en el termostato ha sido alcanzada. Este modo de funcionar desemboca en importantes ahorros energéticos.
Tener instalado un sistema de aire acondicionado con compresor Inverter marcará la diferencia en términos de consumo de electricidad sobre todo cuando el aparato es un aparato grande centralizado para climatizar la vivienda completa (por conductos). Para asesoramiento acerca de los sistemas de aire acondicionado por conductos más eficientes, es conveniente buscar asesoramiento de una tienda especializada en climatización en la ciudad donde se vive. Por ejemplo, si se vive en Valencia es conveniente contar con el asesoramiento de una tienda de instaladores expertos en aire acondicionado por conductos Valencia, ya que de esta forma se podrá seleccionar entre los mejores sistemas de los mejores fabricantes como Fujitsu, Daikin o Mitsubishi Electric y recibir las mejores ofertas en relación calidad/precio.
- Otro método de optimización del rendimiento de los aparatos de aire acondicionado en modo calor es la instalación de un termostato programable. A través de los termostatos programables de última generación es posible ajustar la temperatura de funcionamiento de los aparatos en función de la hora del día y de las necesidades específicas. El alto nivel de control que es posible a través de estos termostatos permite reducir la temperatura cuando la casa está desocupada o durante la noche y aumentarla cuando hay gente. Esto no sólo garantiza un confort óptimo, sino que también contribuye a un importante ahorro de energía al no sobrecalentar la vivienda cuando no es necesario.
Además, un termostato programable ayuda a mantener una temperatura constante y moderada, evitando picos innecesarios y garantizando un uso más eficiente del aparato de aire acondicionado en modo calor. También, los termostatos programables de última generación más avanzados tienen la capacidad para aprender el comportamiento del usuario y sus preferencias, ajustando la configuración del sistema de aire acondicionado automáticamente para optimizar tanto el confort como la eficiencia energética.
- Finalmente, otra estrategia que no es muy común pero que es eficaz para ahorrar en el consumo de energía eléctrica por parte del aire acondicionado, es el uso de ventiladores de techo. Utilizando ventiladores de techo junto con el aire acondicionado en modo calefacción, es posible crear un ambiente interior más confortable y reducir al mismo tiempo la carga de trabajo del sistema de aire acondicionado. La mejor circulación de aire generada por los ventiladores de techo puede ayudar a distribuir el aire caliente más uniformemente por las estancias, permitiendo ajustar el termostato del aire acondicionado en modo calefacción a una temperatura ligeramente inferior sin comprometer el confort. Esta sinergia entre el aire acondicionado en modo calefacción y los ventiladores de techo puede suponer un notable ahorro de energía y contribuir a una calefacción más eficiente y rentable de los espacios vitales.
El seguimiento de estos métodos y medidas de ahorro y eficiencia energética a través del aire acondicionado en modo calor, permitirá reducir el consumo de electricidad durante las pocas semanas de frio que quedan antes del comienzo de la temporada estival.