Simeone podría encauzar al jugador y el Atlético de Madrid disfrutar del fútbol de sus botas
El final de temporada no deja de sorprendernos en materia de jugadores que pueden abandonar sus clubes. Si recientemente era Joshua Kimmich el que anunciaba que no iba a seguir en el Bayern de Munich, ahora es el Manchester City el que está dispuesto a deshacerse de Jack Grealish este verano, una oportunidad de mercado que Simeone podría aprovechar.
El jugador de los citizens ya ha estado en el mercado en otras ocasiones pues su rendimiento, y sobre todo su regularidad, están muy lejos de los demostrados cuando era futbolista del Aston Villa. De hecho, tan solo un año después de su incorporación, siendo el fichaje más caro de la historia del club, Guardiola ya planteó su salida.
Simeone podría meterle en vereda
Después de verle jugar nadie puede dudar de la calidad que Jack Grealish atesora en sus botas. Y es que es un jugador habilidoso, con desborde, peleador y con olfato de gol. Pero, al igual que nadie duda de su calidad, nadie duda tampoco de que su estilo de vida no es para nada el apropiado para un futbolista.
Jack Grealish ha sido protagonista de numerosos vídeos e incidentes en los que el alcohol y la fiesta eran los protagonistas. Sin embargo, el Cholo Simeone piensa que él podría ser el entrenador que le hiciera entrar en vereda, le alejara de los vicios y sacara todo el potencial futbolístico que lleva dentro en una última y gloriosa etapa para ambos en el Atlético de Madrid.
Madrid, una ciudad poco recomendada para Grealish
Madrid es una muy buena ciudad. Es cómoda, es bonita, tiene buen clima y tiene ambiente cualquier día de la semana. Sin embargo, esto que para muchos es beneficioso para una persona como Jack Grealish podría ser la perdición, a pesar del trabajo del entrenador.
Y es que, como hemos dicho, al todavía jugador citizen le gusta mucho la marcha. Y si a este amor por la juerga le sumas la cantidad de días de buen clima que hay en la capital de España tienes el cóctel perfecto para convertir a Madrid en su perdición.