El piloto de Cervera no solo se enfrenta a una disputada lucha en pista, sino también a los jefes de Ducati
Hasta que llegara Ducati, Marc Márquez y Honda formaban una relación de confianza. Uno de esos tándems que se preveían imbatibles con cuatro títulos consecutivos de 2016 a 2019. Pero en 2020 todo cambió. La lesión de Márquez en Jerez y los innumerables pasos por quirófano dejaron al piloto en una situación dramática: desde pensar en la retirada a volver con el objetivo de luchar de nuevo por el título de MotoGP.
En su ausencia, Honda se quedó estancada respecto a las marcas europeas, y eso ha sido fundamental para su decisión de firmar para 2024 con el equipo Gresini. Ahora, desde este 2024, llevará una Ducati, la moto ganadora. Sin embargo, el de Cervera también que no será la tarea más sencilla del mundo, ni mucho menos. Sobre todo porque el equipo oficial no está dispuesto a que el ’93’ pise los talones a Bagnaia.
Ducati no quiere que Marc Márquez de batalla a Bagnaia
Es más; aún de haberse disputado solo una de las 21 citas que tiene el calendario de MotoGP para la temporada 2024, ya se puede entrever de qué va a ir el año. Pecco Bagnaia, vigente campeón, será el rival a batir, Jorge Martín el principal contendiente al título, Pedro Acosta apunta a ser el ‘rookie’ del año… y Marc Márquez promete dar guerra. Y eso es lo que quiere descartar, a toda costa, el equipo oficial de Ducati.
Tanto, que el propio jefe de las motos rojas, Gigi Dall’Igna, quien también fue uno de los valedores de su fichaje, así lo ve. «Marc ya ha demostrado todo su talento y su clase a través de una capacidad de adaptación innata», ha señalado. Para el jefe de Bagnaia, el favorito de la marca italiana al ser el vigente campeón y piloto oficial, Marc es «un temible contendiente sobre una moto completamente nueva para él».
La unión Gresini-Márquez puede decidir el futuro del piloto
Conscientes de la diferencia que iba a haber entre la moto GP24, y la GP23, en Ducati quisieron darle cobijo al Márquez bajo la escuadra de Nadia Padovani. En su condición de equipo no oficial, en Ducati sabían que, a pesar de ser Marc un piloto referencia, en Gresini no están en disposición de exigir la moto oficial, y eso implica una dificultad añadida para el ’93’ a la hora de encarar los Grandes Premios.
Son muchos los que opinan que la alianza Márquez-Gresini puede decantar muchas balanzas. De cómo sea esa relación, de sus resultados en los próximos grandes premios y de cómo gestione el trato con Ducati puede decidir sus opciones en este Mundial y en el futuro. Una pareja que, si consiguen los resultaados y la buena suerte de cara, pueden hacer mucho a los favoritos, y de eso Márquez sabe mucho.