El tabaco calentado ha sido presentado por las grandes tabacaleras como una alternativa «potencialmente menos dañina» al cigarrillo tradicional. Sin embargo, las autoridades sanitarias no han tardado en poner el ojo sobre estos nuevos dispositivos y regular su comercialización. En apenas unas semanas, los estancos españoles se verán obligados a retirar de sus mostradores dos de las variedades más populares de tabaco calentado, debido a la entrada en vigor de una normativa que prohíbe la venta de estos productos con aromas caracterizantes. En este artículo te contaremos de qué tabacos se trata y además hablaremos de los motivos de su retiro.
3Lluvia de críticas desde la industria
Como era de esperar, la industria tabacalera no ha tardado en alzar su voz contra esta regulación. Desde Philip Morris aseguran que «respetarán la norma y evitarán tener aromas caracterizantes», pero no ocultan su malestar ante una medida que consideran «desproporcionada y carente de base científica«. Según defienden, el tabaco calentado es una alternativa «potencialmente menos dañina» que el cigarrillo tradicional, por lo que no debería estar sujeto a las mismas restricciones. Sin embargo, las autoridades sanitarias no parecen compartir esta visión.