La conciliación familiar y laboral es uno de los grandes problemas, pero aún lo es más en Semana Santa y con los hijos en casa. La solución, en no pocas ocasiones, pasa por una colaboración de todas las partes, pero en el ámbito privado pocas veces se ponen los remedios necesarios. Por ello, el sector público vuelve a ser el salvavidas para atajar estos inconvenientes, a veces graves cuando se trata de alumnos con necesidades especiales.
Con este fin y a las puertas de Semana Santa, la Casa de la Juventud de Boadilla del Monte ofrecerá en la ludoteca dos jornadas de Días sin Cole para niños de entre 3 y 11 años, un servicio que será gratuito y que se ofrecerá de 9:00 a 13:45 y de 16:30 a 20:15 horas. Es decir, una guardia que permitirá a las familias trabajadoras poder atender sus deberes, sabiendo de antemano que podrán dejar a los más pequeños entretenidos casi durante 12 horas, más que en cualquier jornada escolar habitual, descontando las horas extraescolares.
Las plazas son limitadas. Las inscripciones pueden hacerse por teléfono 91 633 48 32 o presencialmente, en la Casa de la Juventud, en los siguientes plazos: para el 22 de marzo, a partir de las 9:00 horas del día 19; para el 1 de abril, a partir de las 9:00 horas del 25 de marzo.
LA CONCILIACIÓN FAMILIAR, UN PROBLEMA DE CALADO
La conciliación de la vida laboral y familiar es grave problema para las familias numerosas y para aquellas parejas jóvenes con hijos. Según los datos del Estudio sobre las Familias Numerosas en España, elaborado por la Federación Española de Familias Numerosas con encuestas a más de 9.000 familias de distintas partes de España, el 80% y 87% de estas familias, respectivamente, tienen que compaginar su trabajo con ayuda para poder atender adecuadamente a los hijos.
El problema se da a diario, pero afecta más en momentos de vacaciones y días no lectivos, pero laborables para los padres. Y es que, supone un esfuerzo económico extra en un momento en el que la inflación se come los ahorros de los hogares.
Según la encuesta, prácticamente la mitad de las familias paga para matricular a sus hijos en campamentos de verano o en escuelas para que puedan ser atendidos sin interrumpir la obligación del trabajo.
Quien no lleva a sus hijos a estos lugares recurren a familiares, generalmente abuelos, para poder mantener la atención sobre el niño, mientras que un 30% realiza un esfuerzo económico extra para contratar a una cuidadora.
Cabe recordar que el Gobierno del PSOE retiró la bonificación del 45% en la cuota a la Seguridad Social por contratar cuidadores, mientras que suceden tablas para lograr una flexibilidad en el trabajo para poder conciliar. No obstante, no hay posibilidad y las trabas suponen barreras a la natalidad, tan necesaria en estos tiempos donde los españoles apenas tienen ya uno o dos hijos de media.