Las películas y series basadas en videojuegos tienen más importancia que nunca. El éxito de la película de ‘Super Mario’, la serie ‘The Last of Us’ o incluso la aclamación crítica de ‘Tetris’ han transformado a los videojuegos en la nueva fuente de material para adaptar en un Hollywood que poco a poco empieza a ver cómo los superhéroes dejan de ser una fuente segura de películas e ingresos de cara al futuro inmediato.
2024 no es una excepción, la secuela de la nueva versión de ‘Mortal Kombat’, la adaptación de ‘Borderlands’, la versión televisiva de ‘Fallout’ o la segunda animada de la serie ‘Arcane’, basada en el juego en línea ‘League Of Legends’, y la tercera parte de ‘Sonic’, demuestran que hay una nueva camada de cintas inspiradas en él medio listas para tomar el espacio de los superhéroes en un año donde hay muy pocas películas inspiradas en las capas y las mayas.
Es que en 2024, ignorando algún rezagado proyecto de Sony, solo hay dos grandes estrenos de películas superheroicas: ‘Deadpool y Lobezno’ de Marvel y ‘Joker: Folie a Deux’ de DC, ambas cintas que parecen paralelas a sus grandes apuestas más que piezas importantes de sus universos cinematográficos. Lo cierto es que tras los fracasos de ‘The Marvels’ y ‘Ant-Man y la avispa: Quantumania’ por un lado, y de ‘Shazam: Furia de los Dioses’, ‘Flash’ y ‘Aquaman’ por el otro, parecía evidente que el formato necesitaba una pausa para reinventarse.
No debería ser una sorpresa, entonces que nos encontremos con que la meca del cine está buscando otras opciones. La compleja situación de una industria que no termina de recuperarse de la pandemia y que al mismo tiempo enfrenta la complicada realidad de volver a descubrir estrategias para atraer a los espectadores a las salas después que se acostumbraran demasiado a ver cintas en su casa durante la pandemia. Ahora la pregunta es cuál será la cinta que tenga en el cine de videojuegos el efecto explosión que tuvieron en el mundo de los superhéroes ‘Iron Man’ y ‘El caballero oscuro’ en 2008.
ROMPER UNA MALDICIÓN
Lo que hace que sea tan sorpresivo el hecho de que las películas y series basadas en videojuegos sean parte del panorama Hollywood es que por mucho tiempo fueron rechazadas por el público y la crítica. Es fácil recordar fracasos históricos como la primera película de ‘Super Mario’ de 1993, la adaptación de la saga ‘Hitman’ de 2015, la más reciente película de ‘Assasin’s Creed’ de 2016 o la clásica del cine Z ‘Street Fighter’ de 1994, estos sin entrar en detalle de la desastrosa filmografía de Uwe Boll.
Eran motivos suficientes para espantar a los inversores de las adaptaciones de videojuegos, pero la reciente seguidilla de éxitos, que además incluye algunos éxitos de taquilla menores como ‘Uncharted’ o ‘Detective Pikachu’ es lógico que las casas productoras hayan retomado estas adaptaciones. No es casual que, además de los estrenos recientes, adaptaciones de ‘La Leyenda de Zelda’ y ‘Silent Hill’ se encuentren en producción. Pero esto es principalmente la gran pantalla, en realidad si los videojuegos han conseguido un hogar para sus adaptaciones es en las aplicaciones de streaming.
LA TELEVISIÓN, Y LA ANIMACIÓN, SON UN ESPACIO IMPORTANTE PARA LAS ADAPTACIONES DE VIDEOJUEGOS
Pero la realidad es que más allá de los resultados recientes en la gran pantalla, el primer espacio que los videojuegos consiguieron para adaptar sus historias fue la animación, sobre todo de televisión. Incluso antes del reciente éxito de la película de ‘Super Mario Bros’ series inspiradas en ‘Sonic’, ‘Castlevania’ o ‘League of Legends’ iluminaron la pantalla chica y en particular Netflix ha sabido aprovechar especialmente este mercado.
‘Cyberpunk: Edgerunners’, ‘Arcane’, ‘Cuphead’, la disparatada ‘Capitán Laserhawk’ y el proyecto de adaptar de nuevo ‘Devil May Cry’ o ‘Tomb Raider’ con estudios de animación. Es una apuesta además mucho más barata que series de acción real, pues para estas plataformas por cada ‘The Last of Us’ de HBO o ‘The Witcher’ de la misma Netflix. Por lo que lo normal es que sigamos viendo proyectos de animación basadas en el medio interactivo.