La razón por la que nos suenan las tripas cuando tenemos hambre

-

En el vasto mundo de la fisiología humana, pocos sonidos son tan reconocibles y universalmente asociados al hambre como el resonar de nuestras tripas. Este curioso sonido, técnica y cariñosamente conocido como borborigmos, puede resultar una melodía incómoda en el silencio de una reunión o el preludio perfecto a una comida sabrosa.

Sin embargo, el porqué de este fenómeno va más allá de ser una simple señal de que es hora de comer. A continuación, exploramos los entresijos de esta cuestión, revelando la ciencia detrás de los ruidos de nuestro sistema digestivo cuando se despierta el apetito.

1
UN CONCIERTO EN NUESTRO VIENTRE: ENTENDIENDO EL ORIGEN

Nuestras tripas ‘cantan’ como resultado de una orquesta fisiológica que se activa en respuesta a diversos estímulos. Para entender este concierto interno, primero debemos visualizar nuestro aparato digestivo no solo como un tubo para procesar alimentos, sino como un sistema complejo con múltiples capas de músculos y neuronas. Estos últimos, conocidos como el sistema nervioso entérico, tienen la capacidad de generar movimientos peristálticos, que son contracciones rítmicas destinadas a mover el contenido a lo largo de los intestinos.

La falta de comida en el sistema provoca que estos movimientos se intensifiquen. Esto ocurre como parte de un proceso llamado ‘el complejo motor migratorio’, que ayuda a limpiar los intestinos para prepararlos para la próxima comida. En este estado de limpieza, los gases y líquidos presentes en el estómago e intestinos chocan y producen el ya conocido ruido.

Pero, ¿por qué suena más cuando tenemos hambre y no durante el proceso digestivo en sí? Cuando el estómago está vacío, el sonido se amplifica, de forma similar a cómo el eco rebota en una habitación vacía. Además, durante el ayuno, el cuerpo incrementa la producción de una hormona llamada motilina, que estimula la actividad del tracto gastrointestinal y, por consiguiente, los borborigmos se hacen más frecuentes y audibles.

Atrás