¿No revisas ocasionalmente la luna delantera de tu coche en busca de pequeños desperfectos? ¿Desconoces cuáles son los factores a valorar para decidir cambiarla? En cualquiera de ambos casos, sigue leyendo para saber cuándo es recomendable sustituirla y por qué se trata de una operación que preferentemente debe realizarse en un taller especializado en el Cambio de lunas.
¿Cuándo es aconsejable cambiar la luna delantera del coche?
Si observas un desperfecto en la luna, por pequeño que sea, es preciso que este sea examinado por un ojo experto. Así que, lo mejor es llevar el vehículo a un Taller de cambio de lunas: ahí te dirán si el impacto carece de importancia, si puede repararse o si es imprescindible cambiar la luna para evitar su futura rotura. Y en el caso de fisuras, siempre es aconsejable la sustitución de la luna.
Además, un desperfecto en la luna delantera puede ser la causa de que tu vehículo no supere la ITV. En este sentido, ten en cuenta que el criterio para decidir si el desperfecto es grave o no depende del inspector de turno. También puede ocurrir que por las juntas de la luna entre aire o agua. En este caso, será necesario cambiar la moldura y/o las grapas de sujeción de la misma.
Cómo se cambia la luna delantera de un vehículo
Este es el procedimiento:
- Preparación: se limpia bien la zona adyacente a la luna delantera para eliminar los cúmulos de suciedad.
- Extracción de grapas: con una herramienta específica, se retiran las grapas que sujetan la moldura de la luna delantera. Esas grapas serán reutilizadas.
- Retirada de la moldura: esto ha de hacerse con sumo cuidado para no dañarla, ya que también será recolocada.
- Retirada de la luna delantera: operación que ha de hacerse entre dos personas.
- Presentación de la luna de sustitución: igualmente, son necesarios dos operarios.
- Recolocación de la moldura y de las grapas: la moldura ha de estar ajustada al milímetro y las grapas han de quedar firmemente ancladas en sus emplazamientos.
Añadimos que no se trata de una operación tan fácil de realizar como parece. Si la sustitución no es realizada por manos expertas, existe la probabilidad de deteriorar o romper la luna nueva. Y más alta es la posibilidad de que la luna quede mal colocada y se produzcan entradas de aire y/o agua en el habitáculo. Por tanto, para cambiar lunas del coche, lo razonable es encomendar esta tarea a un taller especializado.
Consejos para prevenir la rotura de la luna delantera durante la marcha
Finalizamos con tres consejos. Si los sigues, reducirás muy notablemente la probabilidad de que la luna de tu vehículo se rompa mientras conduces:
- Si observas un desperfecto, por mínimo que sea, haz que revisen la luna en un taller especializado.
- Mantén siempre una distancia prudencial con el vehículo que te precede, a fin de evitar impactos de gravilla.
- A altas velocidades, conduce con las ventanillas totalmente cerradas.
Esto último es imprescindible para prevenir las roturas: las presiones de aire contrapuestas que se producen al conducir con las ventanillas bajadas pueden provocar la rotura de la luna, muy especialmente si ya tiene desperfectos o si en ese momento recibe un impacto de gravilla.