Como ya pasó con el anuncio de que se revisarán los datos de la posible fusión entre Iberia y Air Europa desde Bruselas, la empresa española sigue confiada de que tendrá respuestas a las exigencias de la Comisión Europa tras la petición de esta de «parar el reloj» de los plazos para pedir una revisión de documentos. Según la empresa, es una medida común en estos procesos, y están listos para afrontar la situación y ayudar a superar este nuevo escollo, que ven como una parte normal del proceso.
«El instrumento “stop the clock” se usa de manera habitual en este tipo de procesos y sirve para recabar información adicional sin consumir el tiempo reglamentado. Por supuesto, IAG trabajará para facilitar lo antes posible todos los datos solicitados que estén en su poder», explican con calma desde IAG al Diario Qué!. De momento no se atreven a adelantar cuánto tiempo puede pasar el reloj en «pausa», pero esperan que no sea demasiado.
Aun así, esto puede alargar este proceso unos meses, lo que representa un nuevo paso para una fusión que ya puede parecer demasiado grande a algunos. Aun así, desde la empresa mantienen la confianza en que esta adquisición será beneficiosa, no solo para ellos, sino para todo el mercado del tráfico aéreo español, en un momento en que la competencia del transporte ferroviario es más potente de lo que había sido en los últimos años previos a la pandemia gracias a la liberalización del mercado de trenes.
«El deseo de IAG es que la Comisión Europea autorice con todas las garantías la compra de la aerolínea. La operación permitirá aunar la fuerza de Iberia y Air Europa en España, lo que traerá importantes beneficios para los consumidores, para el hub de Madrid-Barajas y para la competitividad de la economía de nuestro país», sentencian. De momento no queda más que seguir esperando, aunque es verdad que para la empresa puede existir al menos algo de sorpresa en la decisión de parar el reloj dada la confianza demostrada en las soluciones presentadas en su primer documento para la CE el pasado mes de enero.
De momento, el cronómetro fue pausado el pasado viernes primero de marzo, sin fecha obligatoria para continuar con el conteo de los plazos. Al mismo tiempo, si los involucrados quieren que el proceso avance lo más rápido posible, la mejor opción es entregar los documentos que se soliciten desde Bruselas de la forma más rápida posible, por lo que la reacción de la aerolínea parece la más inteligente posible.
3 MESES DESPUÉS DE LOS ‘REMEDIES’ DE IBERIA EL PROCESO VUELVE A LA PAUSA
Aunque sea normal, parece sorprendente que este proceso de fusión se siga alargando. La empresa tiene la confianza de poder resolver las dudas que se le presenten a Bruselas, así lo hizo saber en enero, pero también es cierto que ha superado un par de crisis internas recientes, la más reciente por la situación de los trabajadores de Handling, por lo que la fusión sería una buena noticia que celebrar en público.
También es verdad que hay dudas en cuanto al riesgo de que se reduzca el número de vuelos totales de España, o problemas para reubicar trabajadores, que pueden generar dudas razonables en el CE. Hasta ahora, cada vez que han hablado del tema, tanto Iberia como IAG han asegurado que esto no ocurrirá, y seguramente son números que han presentado de forma interna desde que se inició este proceso de investigación. La realidad es que antes de esta pausa no era necesariamente el principal problema de la aerolínea que ha sufrido más por sus problemas internos que por la lupa europea.
AIR EUROPA SALPICADA EN EL CASO KOLDO
Por otro lado, es llamativo que este anuncio se haga unas horas antes de que el nombre de Air Europa aparezca dentro del controvertido ‘Caso Koldo’ que ha protagonizado las noticias de los últimos días.
El presunto conseguidor de la trama investigada en el ‘Caso Koldo’, Víctor de Aldama, señaló a la Agencia Tributaria que habría aprovechado su interlocución con funcionarios del Ministerio de Transportes por el rescate de Air Europa, compañía de la que era «consultor en la sombra», para hacerles llegar su propuesta de facilitar mascarillas en plena pandemia.
Así consta en un informe de 52 páginas de la Oficina Nacional de Investigación del Fraude (ONIF) al que ha tenido acceso Europa Press y que consta en el sumario del caso.
Hacienda indica que durante su investigación no logró dar con el nombre de funcionario alguno pero sí localizaron «un posible contacto» porque en los correos aportados por Soluciones de Gestión –empresa con la que la trama canalizó el negocio de las mascarillas– aparece una persona de la que se afirma que es el contacto en el Ministerio para negociar los precios de transporte aéreo con Iberia: Koldo García –exasesor del exministro José Luis Ábalos–.
