El coulant de chocolate, también conocido como volcán de chocolate, es un postre de origen francés que se ha popularizado en todo el mundo. Es un pastel de chocolate pequeño y esponjoso que tiene un centro líquido y cremoso de chocolate caliente. La receta se hace típicamente con chocolate negro, mantequilla, huevos, azúcar y harina. La masa se hornea brevemente en moldes individuales, lo que permite que el exterior del pastel se cocine, pero el interior permanezca líquido.
Cuando se corta el pastel, el centro líquido de chocolate caliente se derrama, creando un efecto similar a un volcán en erupción. A menudo se sirve con una bola de helado o una salsa de frutas rojas para equilibrar la dulzura del chocolate. Si quieres conocer todos los secretos para que este postre te quede digno de maestro repostero, sigue leyendo.
8Usar moldes adecuados
Por último, para que el coulant de chocolate tenga la consistencia adecuada, es importante utilizar moldes pequeños y altos, como moldes para muffins o para soufflé. Además, es importante engrasar bien los moldes con mantequilla y harina para que el coulant no se pegue. Ten en cuenta también, después de hornear tienes que déjalo reposar durante un minuto antes de desmoldarlo cuidadosamente en un plato. Esto permite que el centro del coulant se asiente un poco y no se derrame.
