Imagina que vas a cenar a un restaurante que estabas deseando probar en tu ciudad y después de disfrutar de un completo menú regresas a casa a descansar. Pero al cabo de unas horas la noche comienza a torcerse con todos los síntomas propios de una gastroenteritis. Puede que te haya sentado mal alguno de los platos o algún ingrediente, a veces pasa. Pero resulta que todos los que te acompañaron en la cena están experimentando los mismos síntomas. Puede que nos encontremos ante una intoxicación alimentaria. Es una situación más frecuente de que lo que quisiéramos y cuando pasa, no sabemos muy bien que hacer.
3GUARDAR SIEMPRE EL TICKET
También es importante guardar el recibo o ticket del establecimiento, ya que servirá de prueba, junto con el informe médico, para demostrar que hemos ingerido un alimento que se encontraba en mal estado en dicho local. Lo siguiente sería poner una reclamación, porque tenemos derecho a ello. Se puede hacer de varias formas. La más eficaz y más rápida es ponerse en contacto con la oficina municipal de consumo (OMIC) o de la comunidad autónoma. En la mayoría de ls ciudades hay una o varias de estas oficinas a disposición de la ciudadanía.
