Uno de los mayores miedos de las personas al envejecer es la preocupación por su físico; a medida que transitamos por la vida, nuestras inquietudes cambian y se transforman. En la juventud, tememos al rechazo de nuestros pares, a no encajar en un grupo, o a los monstruos imaginarios que acechan en la oscuridad; sin embargo, al llegar a la edad adulta, los miedos adquieren una nueva dimensión.
El paso del tiempo es una realidad inevitable para todos; sin embargo, en la sociedad actual, donde la juventud y la belleza se veneran como ideales supremos, el envejecimiento puede convertirse en una fuente de profunda ansiedad, y uno de los mayores miedos que experimenta la gente respecto a su físico cuando se hace mayor es la pérdida de atractivo.
5Aceptar el cambio con naturalidad y dejar los miedos en el pasado
Aceptar el paso del tiempo y los cambios naturales en nuestro cuerpo es fundamental para mantener una buena salud mental y disfrutar de cada etapa de la vida; en lugar de luchar contra el envejecimiento, debemos enfocarnos en cuidar nuestra piel de forma saludable y aprender a apreciarla por la historia que refleja.
La insatisfacción con la apariencia física puede afectar negativamente la autoestima, especialmente en mujeres, el miedo a ser menos atractivas o deseables puede llevar a la evitación de situaciones sociales, al uso excesivo de maquillaje o incluso a la búsqueda de soluciones cosméticas invasivas.