¿Qué sabemos de la nueva ley del vapeo?

Como siempre que hay una nueva ley, los comentarios de los medios de comunicación generan bastante confusión. Eso es lo que ha pasado estos días con los cigarrillos electrónicos o vapers, puesto que en muchas noticias se decía que se iban a prohibir los vapers de sabores.

Sin embargo, esto no es cierto, de manera que vamos a explicar qué es lo que va a cambiar con esta ley y qué es lo que se sabe hasta el momento.

Se prohíbe el tabaco calentado de sabores

El tabaco calentado es un producto procesado del tabaco que no se quema, como pasa en los cigarrillos convencionales, sino que se calienta a una temperatura que no supera los 400 grados, de esa manera no hay combustión. Es importante no confundirlo con los dispositivos que liberan nicotina ni con los cigarrillos electrónicos, ya que funciona con un mecanismo diferente que calienta algo muy similar a un cigarrillo.

De este modo, el cambio que se ha producido es que el tabaco calentado se iguala con el tabaco convencional ante la ley, lo que significa que no se puede vender tabaco calentado de sabores. Así, el famoso IQOOS de la marca Philip Morris se ha prohibido, al igual que pasó hace unos años con los cigarros mentolados.

Se va a poder seguir vendiendo tabaco calentado, pero siempre que no contenga ningún sabor extra, pues la idea de la UE es dificultar lo máximo posible que se fume en cualquiera de sus formas.

Otra medida adicional consiste en que el tabaco calentado que se va a seguir vendiendo deberá contener un mensaje informativo tanto en el envasado como en el embalaje. En este mensaje se dice que hay más de 70 sustancias cancerígenas en el humo del tabaco. También se incluirán las fotos que ya vemos en las cajetillas.

Para ello, los fabricantes tienen un periodo de tres meses a lo largo del cual se podrán adaptar sus envases.

¿Qué razón hay para la prohibición?

La razón tiene que ver con la diferencia de opiniones entre los fabricantes y Sanidad, un debate que ha ganado el Gobierno. Desde los fabricantes se dice que los perjuicios para la salud son mínimos al no haber combustión. Eso reduce las emisiones y el daño, lo cual parece que carece de evidencia científica.

Por su parte, Sanidad dice que calentado o no sigue siendo tabaco, lo que quiere decir que tiene efectos nocivos para la salud y que también genera adicción. Además, al emplearlo se emiten sustancias peligrosas que afectan a las personas que hay alrededor, al igual que pasa con el humo de los cigarrillos.

¿Qué ocurre con los vapers de sabores?

Pese a que diversos medios afirman que se van a prohibir los vapers de sabores, lo cierto es que esto no es así. Estos vapers no tienen nada que ver con el tabaco calentado, así que no entran dentro de la nueva ley y su venta sigue permitida sin ningún cambio.

La confusión ha venido por el desconocimiento del sector al igualarse los vapeadores al tabaco calentado, cuando lo cierto es que no tienen nada que ver.

Se está hablando de una futura ley del vapeo

Sí que se lleva un tiempo escuchando comentarios sobre una ley del vapeo que sería más restrictiva que la actual, pero por el momento no se sabe nada y son solo rumores.

Desde Sanidad dicen que habrá que ver cada caso, que es lo mismo que no decir nada. Eso sí, parece que el deseo de este ministerio es que los vapeadores tengan una normativa que se adapte a la del tabaco.

Es posible que la futura ley afecte a los vapeadores desechables

Una de las formas de saber cómo puede ser esa ley de la que tanto se habla, y puesto que estamos en la UE, es mirar lo que ocurre en los países vecinos. No tenemos que ir muy lejos con el fin de comprobar qué medidas se están tomando. En concreto, en Francia ya han prohibido los vapeadores desechables.

Lo más curioso es que no ha sido tanto por riesgos para la salud, en realidad son muy bajos comparados con el tabaco, sino por motivos medioambientales y su falta de reciclaje. El país vecino estaba alarmado por el impacto medioambiental de los vapeadores desechables, pues por la forma en la que se usan lo normal es que terminen en cualquier papelera, generando así una gran cantidad de residuos.

No sería de extrañar que aquí sucediese algo similar, lo que significa que, para hacer pasar la medida con poca resistencia de los compradores y los vendedores, podrían mencionar razones medioambientales, además de las relacionadas con la salud.

Sea como fuere, todo son especulaciones. Lo único que sabemos con seguridad es que ya no se pueden vender tabaco calentado si este tiene sabores.