La obesidad se ha convertido en una epidemia global que afecta a más de 650 millones de personas en el mundo. Solo en España, se calcula que cerca del 30% de los adultos tiene sobrepeso, lo que se traduce en un mayor riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares, diabetes tipo 2, hígado graso no alcohólico, artrosis, apnea del sueño o varios tipos de cáncer. Ante este preocupante panorama, en los últimos años han surgido nuevos medicamentos inyectables que prometen ayudar a perder peso de forma significativa. Ante el avance de este tipo de tratamientos, la Organización de Consumidores y Usuarios (OCU) ha lanzado una advertencia sobre su uso. En este artículo te contaremos que dice la OCU sobre estos medicamentos y hablaremos de los posibles problemas que pueden llegar a ocasionar.
5El gran problema: recuperación de peso tras suspenderlo
Por otro lado, desde la OCU afirmaron que uno de los principales inconvenientes que están mostrando todos estos medicamentos es que la mayoría de pacientes recuperan gran parte del peso perdido al suspender el tratamiento, incluso manteniendo la dieta y el ejercicio. Por ejemplo, en el caso de fármacos como la semaglutida (Wegovy) o la tirzepatida (Mounjaro), se ha observado que los pacientes recobran alrededor de dos terceras partes del peso que habían eliminado previamente. A continuación te contaremos que otros datos ha revelado la OCU sobre este tipo de medicamentos para adelgazar.