Muchos conductores, en un intento por ahorrar dinero ante el constante aumento del precio de la gasolina, han optado por conducir a bajas revoluciones del motor. Si bien esto puede generar un pequeño ahorro de combustible a corto plazo, mantener esta práctica puede causar graves daños y averías en el motor del coche. Conducir de forma prolongada a bajas RPM puede provocar un desgaste prematuro, sobrecalentamiento, pérdida de potencia e incluso daños completos del propulsor. En este artículo explicaremos en detalle por qué debes evitar manejar de esta forma si quieres preservar la salud mecánica y prolongar la vida útil del motor de tu auto.
6Averías frecuentes por ‘ahorrar’ revoluciones
Entre los fallos más comunes y caros que acarrea mantener las RPM muy bajas en trayectos largos, los talleres mecánicos señalan:
- Desgaste prematuro de camisas y segmentos: 700-1.600 €
- Reemplazo de pistones y bielas: 1.100-1.800 €
- Sustitución de árbol de levas: 650-950 €
- Cambio de bomba de aceite: 420-890 €
- Sustitución de turbo o biturbo: 1.000-1.800 €
- Regeneración o cambio de filtro de partículas: 800-1.300 €