Tener el vehículo sin pasar la correspondiente Inspección Técnica de Vehículos (ITV) puede acarrear graves consecuencias en caso de siniestro, tanto para el conductor culpable como para terceros implicados. Las compañías aseguradoras podrían no hacerse cargo. La ITV certifica que un coche cumple los requisitos de seguridad necesarios para circular. Por tanto, conducir sin tenerla al día supone un gran riesgo por la falta de garantías técnicas y mecánicas del automóvil. En este artículo analizaremos en detalle lo que puede ocurrir si se tiene la mala suerte de sufrir un accidente en esas condiciones.
3Cobertura garantizada si no causamos el accidente
Imaginemos una situación en la que sufrimos un accidente, pero no hemos sido los causantes o responsables del mismo. Es decir, la culpa y negligencia ha venido totalmente de un tercero con el que hemos colisionado o que se ha visto involucrado. En ese caso, por lo general, las compañías aseguradoras sí se hacen cargo sin problemas de financiar las reparaciones de los daños de nuestro vehículo y cubrir las correspondientes compensaciones económicas para los ocupantes, tal y como estaría estipulado en nuestra particular póliza contratada.