El permiso de conducir es sinónimo de independencia y autonomía. Nos brinda la extraordinaria capacidad de desplazarnos adonde queramos, cuando queramos. Representa libertad en estado puro, especialmente tras la jubilación, cuando se dispone de más tiempo libre para viajar. Sin embargo, nuestro cuerpo y mente también envejecen. Con los años pueden aparecer limitaciones físicas o cognitivas que acaben afectando peligrosamente nuestra forma de conducir. Por esta razón, la Dirección General de Tráfico (DGT) solicita a los conductores mayores de 65 años una serie de pruebas que, en caso de no superarlas, podrían costarte el carnet. A continuación te contaremos qué trámites debes realizar a partir de los 65 años para que la DGT no te quite la posibilidad de desplazarte en coche por tu propia cuenta.
8Legislaciones más estrictas en otros países de nuestro entorno
Si comparamos las medidas implantadas en España para regular la conducción en mayores con las de otros países europeos, se evidencia que aún nos queda un largo trecho por recorrer. Buena muestra de ello es que en naciones de nuestro entorno como Reino Unido o Alemania, la validez de los permisos de conducir expira directamente a los 70 años. A partir de esa edad límite, todos los conductores británicos o alemanes deben someterse a una renovación médica de su permiso cada 3 años si desean seguir conduciendo legalmente.